Revista Bares y Restaurantes
Otra vez de guachinche, y otra vez por La Corujera. Aprovechen, porque se les acaba el plazo a los guachinches para seguir tal y como los vemos ahora. Ya está la ordenación preparada, y en poco tiempo, volverá la época en la que en los guachinches sólo se podrán ofrecer tres platos de cocina, y para beber solamente vino o agua. Y una vez que esto suceda, éste que les escribe dejará de aparecer por esos sitios. Yo no era (ni soy) asiduo a los guachinches clásicos por dos motivos: Yo salgo fundamentalmente a comer, no a beber, y un sitio con sólo tres platos no me llama demasiado. Pero es que además no soy bebedor de vino, aunque me he ido acostumbrando a la cuartita de rigor, siempre rebajado con seven up. Si a partir de ahora, sólo sirven vino y agua, no te digo más. Y los que, como en mi caso, vayan con niños a comer, pues ya saben: les piden el plato y (ajo y) agua. En mi opinión, y sin profundizar ya mucho en el asunto, creo que la ordenación, combinando una mayor exigencia en algunas cosas, con un poco más de mano abierta en otras, se podría haber acercado más a la satisfacción de todos. Pero bueno, si así lo han decidido, que sea para bien. Pero a mí que me "desaborren". Los echaré de menos.
En éste caso paramos aquí, en plena zona de guachinches. Un sitio bastante conocido, situado en un precioso entorno, rodeado de una finca de viñedos, donde te aislas del ruido, pese a estar casi pegado a la carretera, junto a la cual dispone de una zona de aparcamiento de tierra. La casita (término cariñoso, porque tremenda "casita") alberga un par de comedores en lo que serían las habitaciones, y se complementa con una estupenda terraza, donde se ubica la parrilla para la carne. También se puede acceder a la azotea, pero sólo para relajarse con las vistas, o para que los niños se entretengan. Allí no hay mesas. Hacía un día espléndido y se estaba muy a gusto allí. Si además se comía bien...
En su menú prepara comida casera, bastante más de los tres platos que tendrá que preparar en un futuro si quiere seguir siendo un guachinche. Al acceder a los comedores interiores se aprecia la actividad frenética de la cocina que está en la entrada, y nos llegaban unos olores que alimentaban. En principio, pintaba bien la cosa. Además de lo que pedimos nosotros, recuerdo que ese día ofrecían Queso fresco o asado, Garbanzas, Carne fiesta, y carne a la brasa, Bistec o Chuleta de cerdo. Había algún plato más que no recuerdo.
Nosotros empezamos con una Fabada, normalita. Lo que si estuvo bueno, el mejor de los que probamos, fué el plato de mejillones a la plancha, con mojito verde, preparado a la manera de las lapas. Se nos hizo poco, y pedimos un segundo platito. El plato de Carne con papas que siguió tenía una carne tierna y las papas muy buenas, pero eché en falta un toque más sabroso. Y terminamos con un plato de huevos estrellados, donde lo más destacable, de nuevo fueron las papas fritas. De beber, una cuarta de vino, tres refrescos y agua. No tenían postre. El servicio fué rápido, tienen bastante personal. Comimos bien, aunque cierto es que esperaba alguito más de un sitio tan conocido y asentado en la zona. Igual la especialidad es más la carne a la brasa, que no pedimos. Pero no estuvo mal, y a buen precio, unos 33€.
Dirección: Carretera antigua Corujera, 15. SANTA ÚRSULA
Teléfono: 696-094 066
Coordenadas:Latitud: 40.41687477895358 (40º 25' 0.75" N)
Longitud: -3.703308399999969 (3º 42' 11.91" W)