Guerreros de Arena (opinión).

Hace algunos meses hice un pequeño comentario acerca de la serie de moda en nuestra tv local, mi amor el wachiman. Es precisamente canal 2, quien comenzó toda esta fiebre por hacer miniseries en un primer momento de personajes populacheros (dina paucar, chacalon, augusto ferrando entre otros), todas con el suficiente éxito para que otros canales le sigan el paso (entiéndase canal 4). Frecuencia latina comienza el año  con esta nueva propuesta que consiste en contarnos la historia de un grupo de jovencitos marginados que logran la superación a través del baile apoyados por una bailarina profesional de clase alta. El primer punto importante es que la serie se basa en la experiencia particular de la bailarina Vania Masías con el grupo que ella misma formo en el 2005 llamado “Ángeles de Arena”, o sea que no es la historia de Vania Masías propiamente dicha,  como ella misma se encargó de comentar a los diferentes medios interesados. Una idea que del todo no es de mi agrado, me explico, a través del tiempo la tv local nos ha retratado la misma línea argumental en todas las series basadas en personajes conocidos. Todos de una familia pobre, que no tenían ni para el pan, crecieron y en la capital con mucho esfuerzo lograron la superación ya sea cantando o haciendo cualquier otra gracia, todas con el mismo guion desgastado  y tonto. Aquí en cambio teníamos la oportunidad de ver  la historia de alguien diferente, una chica de clase acomodada que lo tenía (y tiene) todo y que en su juventud se paseó por Europa  mientras estudiaba danza.  La serie corta toda esa etapa y comienza con el regreso de Diana Páez (carolina cano) a lima- Perú para participar en una obra en el teatro municipal, en una avenida ve desde su coche a 7 jóvenes haciendo piruetas y se queda impactado por su talento, de ahí en adelante la historia conocida e imaginable. 

Aquí el primer pero que le veo a la miniserie es sus dos primeros episodios, el baile, para ser una serie que pretende contarnos la historia de un grupo de bailarines son demasiadas escasas la escenas de verdadero baile que podemos apreciar se puede entender  que por parte de carolina cano, que no es una bailarina profesional, nos limiten a verla bailar, pero en el caso de los 7 “guerreros de arena” que pertenecen verdaderamente al grupo de  “Ángeles de arena” las escenas de baile son prácticamente las mismas repitiendo las mismas piruetas que el de las promociones, aunque es muy pronto y aún falta varios episodios (la serie tendrá un total de 30 episodios) creo que algo mejor  se podría haber hecho para darle mayor impacto en un principio, eso en relación al baile.  Segundo, el mismo cliché de siempre en cuanto al rollo de las clases sociales y las diferencias que estas ocasionan. Si bien es cierto podemos decir que hay algo más de en la relación Páez – bailarines es que tiene como base el mismo talento que comparten  pero eso no significa que la personalidad de Páez deba ser tan inclusiva en relación hacia los pobres. Si  se presta atención a ciertas escenas mientras que su amiga Jimena (Claudia berninzon) hace comentarios bastantes discriminatorios ella muestra una actitud contraria, entonces no encontramos con los mismos formulismos de novela barata y puedo decir que personajes como su amiga y su propia madre (patricia frayssinet, hermana de ivon fraysinnet la que hace de Francesca Maldini en al fondo hay sitio) están solo para resaltar el valor de” todos somos iguales y no importa que yo viva en san isidro y tú en un arenal” con el que predica nuestra protagonista. Algo parecido podemos decir de los “guerreros”, todos (a excepción del chino), se muestran desconfiados y con cierto resentimiento (social) para con la protagonista. Comentarios como “los quiere para un desalojo”, “vámonos o nos van robar”, están bastante fuera de lugar. Al parecer a los desarrolladores de este tipo de series les cuesta romper el molde ya sea por desidia o por temor y prefieren  ir a lo seguro y lineal. Tercero, la ciudad, algún día veré en este tipo de series un verdadero reflejo de lima, ¿porque siempre se repiten los mismos escenarios? Por una parte nos muestra el lado de más bonito de lima (los de siempre), mientras que por otra parte nos muestran barrios pobres de la ciudad pero lo que se puede apreciar es muy poco y sin mayor importancia si es una serie de chicos marginales que mejor oportunidad para mostrarnos un verdadero escenario pobre y marginal (claro que sin llegar a ver lugares dramáticos que nos invita a percibir la desgracia en la que lamentablemente viven una gran parte de limeños como se emite en ciertos programas de tv locales) todo queda en intentos tímidos como una vista a lo lejos de la ciudad, una casa de escasos recursos en la noche o alguno de los protagonistas caminando por algún cerro de lima.  Cuarto, las situaciones demasiado forzadas por ejemplo en el caso cuando diana y Jimena luego de hacer compras deciden comer algo y por esas casualidades de la vida en el mismo local trabaja uno de los “guerreros” disfrazado de pollo, bien dicen que el mundo es un pañuelo.  Quinto, la personalidad de los “guerreros” todos estereotipados con una cualidad particular, tenemos al intelectual, al kpoper, al responsable, etc (en un primer momento me hizo pensar si no estoy viendo al escuadro sailor moon versión peruana). Sexto, la historia de amor, se pudo obviar pero no se hizo si no hay historia de amor no vale la pena. Respecto a este punto quizás podamos ver algo interesante como el peso que tiene para nuestra protagonista la disyuntiva entre trabajo o vida personal y la importancia que le da obviamente para crear el conflicto personal, veremos cómo se desarrolla la historia, y si el personajes de Gustavo (Gonzalo Revoredo) marca algo interesante en la trama o solo esta para ver los de siempre en cuestiones amorosas.  Independientemente de cualquier comentario que haga sigo pensando que la fábrica peruana viene haciendo lo mismo, contando historias acartonadas cambiando los nombres pero con el mismo guion artificial sin mayor pretensión, conformista, con falta de originalidad, sean las causas presupuestales creo que el mayor problema radica en el grupo creador, en los guionistas y las cadenas televisivas que prefieren lo seguro con fórmulas recicladas (nacionales o extranjeras) a producir material distinto capricho que algún día espero termine por el bien de nuestra pobre televisión local (y de los que no tenemos cable). He dicho.