Me encantan los guisantes, y si son frescos mucho mejor, normalmente en esta época se pueden disfrutar de ellos sin mucho problema, pero este situación de confinamiento, impide visitar los mercados con asiduidad o visitar a los amigos y a la familia, que a mi me surte de guisantes todas las primaveras. Así que no queda otra, que consumirlos congelados, que dicho sea de paso no están nada mal, y para muestras esta receta, que cocinados con panceta, gambas y alguna otras cosilla, está francamente buena. Además, es sana, tiene un un buen precio y... es muy fácil de hacer!
Ingredientes:
- Aceite de oliva virgen extra
- 300 g de gambas
- 4 dientes de ajo
- 1 trocito de Chile seco
- 1 cebolla
- 50 g de panceta
- 1 calabacín pequeño
- 400 g de guisantes
- Sal y pimienta
- Perejil y hierbabuena
- En una sartén con aceite de oliva pochamos los ajos y el trocito de chile durante 2-3 minutos, o hasta que los ajos estén transparentes. Incorporamos las gambas descongeladas y bien escurridas las salteamos unos 2-3 minutos, volcamos en un plato y reservamos en un lugar cálido.
- Volvemos a poner la sartén al fuego y sofreímos la cebolla picada en brunoise, hasta que esté transparente, añadimos la panceta y salteamos uno o dos minutos.
- Añadimos el calabacín, salpimentamos, mezclamos bien y dejamos cocinar hasta que esté al dente.
- Incorporamos los guisantes, subimos el fuego al máximo, añadimos el líquido de las gambas y dejamos cocinar tres o cuatro minutos, los guisantes congelados se cocinan enseguida.
- Agregamos las gambas, mezclamos, dejamos cocinar un minuto y retiramos.
- Servimos con perejil picado y hierbabuena.
#yomequedoencasa#estevirusloparamosentretodos
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¡Buenas noches!