Guiso de costillas con alcachofas y patatas receta fácil

Nada mejor para disfrutar de un plato de cuchara que un buen guiso, sobre todo si esta elaborado de forma tradicional como el que te recomiendo en esta ocasión, se trata de un guisado de costillas de cerdo y acompañado de alcachofas y como patatas, una receta sabroso y muy sencilla de preparar.
Cómo podrás ver en la elaboración es muy simple de preparar, solo déjame darte unos pequeños consejos, las patatas en lugar de cortarlas con un cuchillo, las tienes que cachear, ya sabes las empiezas cortando y las acabas rompiendo, para que suelten un poco de almidón y así el caldo te quedará mas espeso.
Ya verás que si sigues los pasos de la receta conseguirás un estofado con mucho sabor,  así que anímate a prepararlo y ya sabes que también dispones de un vídeo paso a paso, para que no te pierdas ninguna parte del proceso de elaboración.

INGREDIENTES

• 350 g de costillas de cerdo
• 400 g de patatas
• 3 Alcachofas
• 1 Cebolla
• 3 Dientes de ajo
• 1 Tomate triturado o rallado
• 1 Hoja de laurel
• 1 Cucharada de pimentón rojo dulce (paprika)
• 3 Cucharadas de aceite de oliva
• Sal al gusto
• 2 litros de agua

(4 Personas)

ELABORACIÓN

Pon una cazuela a fuego medio y echa el aceite.
Cuando  esté caliente añade las costillas de cerdo troceadas. Echa un poco de sal.
Sofríelas unos 6 minutos hasta que queden doradas.
Echa la cebolla y los ajos, todo pelado y picado.
Lo sigues sofriendo unos 4 minutos hasta que la cebolla empiece a estar dorada.
Ahora echa el pimentón rojo y lo sofríes unos 15 segundos.
Añade el tomate rallado o triturado y la hoja de laurel.
Lo sigues sofriendo un minuto más.
Vierte el agua y echa sal al gusto.
Añade las alcachofas peladas y troceadas.
Añade también las patatas peladas y cortadas en trozos medianos.
Remuévelo bien.
Cuando empiece a hervir lo dejas que se cocine durante 25 minutos aprox. a fuego medio.
Recuerda remover con cuidado de vez en cuando.
Pasados los 25 minutos comprueba que las patatas están listas.
Saca un trozo de patata y comprueba que está cocida.
Pruébalo de sal y rectifica si hace falta.
Retira la cazuela del fuego y ya lo puedes servir.