Los gusanos de seda son una especie de lepidóptero originario de Asia, aunque hoy en día se crían en cualquier parte del mundo. ¿El motivo? La seda que producen cuando están en la fase crisálida o pupa. De ahí su nombre
Cuando están en la etapa de oruga o larva, se alimentan de la hoja de la morera, y están considerados como el animal que más come en relación a su tamaño y tiempo de vida. Esto es debido a que a partir de su etapa crisálida, ya no vuelven a alimentarse hasta su muerte, mientras que, además de producir la seda, deben alimentar a la numerosa prole que traerán al mundo.
La seda la produce usando como materia prima el almidón de la hoja de morera, y con ella cubre completamente la crisálida con un envoltorio en forma de huevo, que si se desenrollara daría un hilo de más de un kilómetro de largo.
Cuando la crisálida se convierte en mariposa y sale del capullo de seda, ya no vuelve a alimentarse hasta la muerte, que le sobrevendrá en unos quince días. En ese tiempo, su única misión será encontrar una pareja con la que copular para poner huevos y que el ciclo comience otra vez.
Muchos niños han disfrutado criando gusanos de seda en cajas de zapatos, pues era habitual que los vendieran en los mercados, junto a bolsas con morera para alimentarles.