Gwyneth Paltrow no podía controlar la risa al besar a Johnny Depp en “Mortdecai”

La actriz sentía cosquillas al besar a Jhonny Depp debido al bigote con el que el actor encarnó al excéntrico comerciante de arte, Mortdecai. La guapa actriz Gwyneth Paltrow padecía de incontrolables ataques de risa, al punto que temió ser despedida por no poder controlarse.

Durante el rodaje de Mortdecai, las escenas románticas del actor con la actriz que daba vida a su mujer, , se convirtieron en toda una odisea. El motivo era el bigote que utilizaba. lo encontraba, por alguna razón, terriblemente gracioso y ridículo.

"Probablemente arruiné quince tomas, lo cual era divertido al principio, hasta que miras alrededor y el equipo completo está en plan: "¡Oh Dios mío!". Sinceramente me estaba clavando las uñas en la piel para no reírme en las escenas donde tenía que besarlo, y pensaba: "Me van a despedir", explicó la actriz entre risas.

El controvertido e hilarante mostacho, forma parte de la personalidad de

Mortdecai, el bribón comerciante de arte que recorre el mundo buscando una pintura robada en la cual se dice, tiene el código de una cuenta bancaria perdida llena de oro nazi. Esta aventura lo lleva a atravesar el mundo solo armado con su buena apariencia y encanto especial para recuperarla; pero a su vez tendrá que lidiar con su esposa "Piernas Largas" (Gwyneth Paltrow) y un reconocido terrorista internacional.

Sumándose a la lista de pícaros granujas, encantadores buenos para nada y astutos aventureros interpretada por

Johnny Depp, el rol de Charles Mortdecai, un aristócrata británico con problemas de liquidez, cae perfectamente en el papel central de esta inigualable comedia de acción.

Basada en la popular trilogía del carismático antihéroe escrita por , Charlie Mortdecai es un vividor profesional y ocasional comerciante de arte con sus finanzas eternamente en la cuerda floja.

Haciendo malabarismo entre algunos rusos enojados, el MI5 británico, una esposa de piernas largas hasta lo imposible y un terrorista internacional, el elegante, y a tiempo parcial pícaro comerciante de arte Charles Mortdecai debe atravesar el mundo armado tan solo con su buena apariencia y encanto especial en una carrera para recuperar una pintura robada que se rumorea contiene la clave para una perdida cuenta bancaria llena de oro nazi.