Autor: Jay Ryness
Vamos a empezar pues con los 7 hábitos que van a hacer que vuestra rutina de sueño cambie por completo. Comenzamos.
HAZ EJERCICIO:todos a estas alturas de la película sabemos lo importante que es el ejercicio físico para todo, pero quizás no le otorgamos el punto de que, gracias a él, podremos dormir mejor.El por qué ocurre esto es muy sencillo, cuando llegamos a la cama cansados, dormimos mejor.Es importante entonces, dedicar un tiempo a ponerse en forma, pero no debemos hacerlo antes de irnos a dormir, pues conseguiríamos el efecto contrario, es decir, nuestro cuerpo se activaría y lo último que conseguiríamos sería dormir.
CUIDAR LA ALIMENTACIÓN:todos los alimentos que contengan cafeína debemos dejarlos de lado, como mucho un café por las mañanas. El alcohol también es mal compañero del sueño, pues aunque te quedes dormido en un principio, a media noche te desvelarás sin remedio.También debemos evitar las cenas copiosas antes de ir a dormir, irse a la cama con el estómago lleno no es nada aconsejable. ¿No os decían vuestras abuelas aquello de que si ibas a la cama con el estómago a reventar tendríais pesadillas?, pues eso, no hay nadie más sabio que las abuelas (por encima de las mamás).
LIMITAR LAS SIESTAS:dormir siestas eternas por las tardes nos quita las horas de sueño que de noche necesitaremos para descansar. Lo mejor es disfrutar de mini siestas reparadoras de no más de 20 minutos, que conseguirán que recarguemos pilas sin que lo notemos a la hora de irnos a dormir.
PONTE CÓMODO: no me refiero a tener un pijama amoroso, que también, más bien quiero decir que preparemos la habitación con vistas a favorecer el sueño; hacerla lo más oscura posible, que no haga mucho calor y todos aquellos detalles que nos beneficien el descanso.Es primordial contar con un colchón estupendo y una buena almohada que nos cuidarán mientras dormimos, convirtiendo el dormir en una cura para nuestro cuerpo.
Autor: Steve Petrucelli
MARCARNOS UN HORARIO DE SUEÑO: acostarnos siempre a la misma hora acostumbrará a nuestro cerebro que, a determinada hora, debe prepararse para dormir. Es muy importante respetar las horas necesarias para nuestro descanso, nunca menos de 6 horas ni más de 8 (aunque cada persona es un mundo).
IDEAR UN ESQUEMA PARA TODOS LOS DÍAS: en los bebés y niños pequeños es muy normal el diseñarles un ritual que les ayuda a conciliar el sueño, no veo la razón para que, una vez crecidos, no podamos continuar con un ritual, dejando de lado los cuentos infantiles por libros más acordes a nuestra edad y gusto. Escuchar música relajante es otra buena opción.Deberíamos desterrar de nuestro ritual, y de nuestro cuarto, aquellos aparatos electrónicos que van a hacer que nuestro cerebro se active, como son la televisión o el ordenador.
CONTROLAR LA ANSIEDAD Y EL ESTRÉS: si sufrimos de estas dolencias lo más probable es que ya sepamos cómo utilizar la respiración para conseguir relajarnos. No está de más buscar y aprender técnicas de relajación si tenemos problemas para dormir, muchas veces es el mismo estrés el causante de nuestro insomnio.
Autor: Pavel Venegas
Pues ya veis que los pasos que os propongo para conseguir un sueño reparador no son nada difíciles, podemos introducirlos en nuestras rutinas sin casi darnos cuenta.Estos hábitos conseguirán que durmamos de un tirón, y no hay sensación más maravillosa que levantarse por la mañana descansado y con energía para enfrentarse al nuevo día.Os atrevéis a poner en práctica estos tips? Si lo hacéis contadme en qué ha cambiado vuestro descanso.Hasta el próximo día…….sed felices!