A veces la manera de escribir los tratamientos o de nombrar a las personas es más importante que el contenido en sí. Para presentar a una persona, para escribir una carta… para cualquier actividad que requiera dirigirse a otra persona, deberá utilizar un tratamiento adecuado.
Los tratamientos pueden venir definidos por razones de cargo o por razones de mérito. Los de cargo suelen ser limitados en el tiempo (cargos empresariales, políticos, etc.). Los de mérito (o título) suelen ser vitalicios, es decir, perduran mientras lo haga la persona que ostenta ese mérito o título. La utilización del tratamiento adecuado, es un símbolo de respeto hacia la persona a la que se dirige.
Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que en Baleares, Cataluña y Valencia no utilizamos la misma fórmula que el resto de España.
En estas tres comunidades utilizamos simplemente el tratamiento de Señor o Señora acompañado del nombre y apellidos del destinatario. En cambio, en el resto del país se utiliza el Señor o Señora acompañado de Don o Doña + el nombre y apellidos de la persona aquien nos dirigimos.
Si se da el caso que tenemos que poner un tratamiento honorífico por su condición social, bien sean embajadores, magistrados, militares, religiosos o demás, utilizamos en tratamiento que les pertenece + Sr./Sra. + nombre y apellidos. Por ejemplo:
Excmo. y Rvdmo. Sr. Javier Salinas Viñals
Obispo de Mallorca
Si dicha personalidad tiene diferentes tratamientos por tener varios títulos nobiliarios, lo más común es poner el tratamiento de mayor rango.
Debemos poner siempre el tratamiento de Señor con el apellido y el de Don con el nombre de pila. O bien utilizar la fórmula completa Señor Don ….. con el nombre completo de la persona a la que se dirige. El hecho de poner el Señor con el nombre de pila o el Don con el apellido no es lo adecuado. Ej. Señor Carlos o Don Rodríguez, no suenan ni tan siquiera demasiado bien.
Si bien es verdad, que la palabra Don está en desuso y de cada vez se utiliza más la palabra Señora/Señora.