La educación es uno de los pilares básicos con los que se construye un país, está claro que los jóvenes son la columna vertebral de toda sociedad, y que mejorarla debe ser una de nuestras grandes prioridades. Pero, por H o por B, no parece que esté enfocada de la manera correcta. En lo que respecta a las nuevas tecnologías existen los MOOCs, una forma de educación bastante interesante, aunque en muchas ocasiones no existe una interacción real entre el “profesor” y el alumno. Como muchas veces, Google, una de las mayores empresas del mundo, ha tomado nota y ha dado a luz Google Oppia, una plataforma de educación interactiva construida gracias al software libre.
¿Qué significa ésto?, pues bien, Google Oppia quiere, de alguna manera, cambiar la forma tradicional de educación, ir más allá. A muchos les habrá pasado que están en clase y les explican muchísimas métodos de resolver problemas y fórmulas, que si nos las aprendemos bien y las aplicamos iremos avanzando curso a curso sin ningún problema, simplemente memorizando y plasmándolas en un papel. El famoso “no, eso no entra, así que no te lo estudies”, o, el no menos popular “tenía la fórmula en una chuleta así que contesté bien” están a la orden del día, miles de ejemplos se podrían dar de que realmente lo que nos enseñan no es siempre lo que utilizaremos.
El sistema educativo actual está construido para la homogeneidad, salirse del guión está muy mal visto. Cursaremos la ESO, el Bachillerato, llegarán los nervios de la PAU, entraremos en la carrera que queramos y acabaremos pensando que hemos hecho lo correcto. Pero, ¿y ahora qué?, se preguntarán muchos, usaré ese triangulo rectángulo que me enseñaron en el colegio o no me valdrá para nada. La mayoría de la gente piensa que estas cosas solo sirven para ir avanzando, para formarse y acabar una carrera, conseguir un trabajo y ganar dinero -si es posible una buena cantidad.
La mentalidad de la gente es el mayor enemigo que existe, y esta mentalidad se fortalece, en gran medida, a través de la educación. ¿Qué pasaría si en vez de enseñarnos un par de fórmulas matemáticas o los nombres de un par de filósofos de la antigua grecia, nos cuentan como salieron esas fórmulas y en que se basa el comportamiento tan adelantado de los griegos?, por ejemplo. Para la mayoría de la gente, solo genios como Mark Zuckember o Steve Jobs son capaces de crear algo, de innovar de alguna forma y conseguir lo que quieren. A lo que voy es que todos podemos ir más allá, sobre todo si desde nuestra educación nos enseñan a hacer las cosas y no a repetir miles de patrones, tenemos que aprender a pensar.
Oppia busca la participación de todos, compartir conocimientos y enseñarlos de una forma que nos haga pensar, una forma donde nos pique el gusanillo de conocer acerca de ello. Detrás de todos esos números que vemos en las pizarras de nuestras aulas existen multitud de historias increíbles. No es un bicho raro aquel que quiera conocer algo más que una simple fórmula, Google quiere revertir los porcentajes y enseñarnos números, letras, y cualquier cosa que se pueda aprender -todo. Las clases de esta plataforma buscan la total interacción entre alumno y profesor, ya que después de cada aprendizaje tendremos cuestiones donde el propio motor decidirá si lo hemos aprendido y podemos pasar al siguiente nivel. Además al tratarse de un proyecto de software libre todo aquel que quiera puede contribuir a mejorarlo.
En la página web de Oppia nos cuentan las bases del proyecto y nos proponen un ejemplo, recogido del proyecto Euler, que ahora os contaré lo que es. En este ejemplo podemos ver como nos hacen pensar en como resolver un problema matemático muy grande haciéndolo más pequeño; a cada respuesta mal dada que enviémos, Oppia nos ayuda a pensar en como hacerlo, dándonos pistas y añadiendo documentación para llegar a entenderlo, todo paso por paso, como el gran Wolphram Alpha. Aunque este problema al final sea de computación, es decir, tendremos que escribir código para llegar a la solución, la idea es aplicarlo a todo tipo de contenido.
Y ahora algo que habia quedado en el aire, ¿qué es Project Euler?. Este proyecto matemático consiste en una serie de problemas (ya son más de 450 con uno nuevo cada fin de semana), donde encontraremos diferentes dificultades, pero todos solucionables en menos de un minuto gracias a algún tipo de algoritmo. Una vez acertada la respuesta podremos entrar en un foro de dicha pregunta, para ir más allá y conocer los diferentes caminos que ha escogido la gente para llegar al final. Este proyecto cuenta con más de 360.000 usuarios en todo el mundo y goza de bastante popularidad en las comunidades específicas del tema.
Los MOOCs como alternativa a las aulas físicas, Oppia como gran novedad y Project Euler, liderando la tabla de ejemplos, son solo algunos de los proyectos tecnológicos que intentan hacer algo para mejorar la educación, sin olvidarnos de las charlas divulgativas de TED. En mi opinión, Oppia es el más ambicioso, aunque solo sea por ser desarrollado por Google, ya veremos como evoluciona y si de verdad supone un cambio en la forma de enseñar. Lo mejor de la educación a través de la red de redes es que es a nivel global, y todos los que tengan un ordenador con conexión a Internet pueden tener acceso a ella. La revolución tecnológica ya está aquí y es muy aplicable a la educación, esperemos que la haga mejorar y todos nos enteremos un poco más de las cosas y no limitarnos a ser marionetas. Menos recortes y más innovación.
“Regala un pescado a un hombre y le darás alimento para un día, enseñale a pescar y lo alimentarás para el resto de su vida.”
Proverbio Chino