Hasta el momento nunca había aparecido un cántaro con indicaciones de su contenido. FOTO: EFE
Según el director del CASC, Gustau Vivar, este tipo de cántaro, denominado "Dressel 20 parva", es muy conocido, pero nunca había aparecido con las indicaciones del producto que transportaba."Esta ánfora es muy conocida, aunque hasta ahora no sabíamos qué llevaba, sabíamos que aceite, pero no sabíamos cuál ni para qué", ha explicado Vivar, quien ha relatado que "el Oleum dulce es muy fácil de encontrar en los textos en latín para hacer recetas de cocina romana".
Los responsables del CASC han presentado hoy sus hallazgos más destacados del pasado año, entre los que destaca también en Aiguablava el de la primera copa de cristal que se encuentra sumergida en el litoral catalán, ya que este material es muy frágil.
DECORACIÓN SERPENTIFORME
La pieza cuenta con decoración aplicada a hilos serpentiformes incoloros y podría ser de finales del siglo III a. C., según los exámenes de los técnicos.
Otro hallazgo en esta zona es un cesto, en un "excepcional estado de conservación", según Gustau Vivar, que servía para sacar el agua que entraba en la embarcación.
El CASC finalizó en 2014 los trabajos arqueológicos en Aiguablava, que se iniciaron en 2006 con el descubrimiento de tres barcos de época romana de entre los siglos I y II a. C.
OTROS DESCUBRIMIENTOS DEL CASC EN 2014
Los arqueólogos también intervinieron el pasado año en las excavaciones del barco Deltrebre, que se hundió en el siglo XIX en la desembocadura del Ebro y donde han aparecido una campana de bronce, un calibrador de balas y centenares de metros de cabos de diferentes grosores, algo difícil de encontrar en relativo buen estado.
El CASC también ha finalizado los trabajos de excavación del pecio de Cap de Vol, en el Port de la Selva, un embarcación del siglo I a. C. que se descubrió hace dos años y cuyos planos se han dibujado con la ayuda del departamento de robótica de la Universidad de Girona.
En la campaña de este 2015, el CASC seguirá con la excavación en Deltebre y se trabajará en un nuevo pecio hundido bajo las aguas del litoral de Port de la Selva, no muy lejos de Cap de Vol, pero a mayor profundidad.
(Fuente: La Vanguardia / EFE)