Desde hacer un par de meses ya tengo otro motivo más para dejarme caer por Malasaña. En esta ocasión se trata de un argumento gastronómico, me refiero al Zombie Bar y sus preciadas hamburguesas. Un sitio original y divertido en el que los amantes de este tentador plato podrán colmar sus exigentes expectativas.
Hace un tiempo saqué a la luz mi ranking personal de hamburguesas en Madrid, un breve listado en el que muchos de vosotros intuyo haríais alguna modificación que otra… fueron precisamente vuestros comentarios los que me pusieron tras la pista de este restaurante ubicado en la Calle Pez, 7, en plena efervescencia malasañera.
En esta dirección encontraréis un local muy curioso, enfundado en una decoración atrevida, con tintes undergrounds y modernos. Cuando entras es fácil reconocer a los que están allí por primera vez ya que los puedes observar analizando sus paredes y mobiliario (como hice yo) como el que acaba de aparecer en medio de un planeta sideral.
En el Zombie Bar hay detalles que lo hacen diferente, como el hecho de que te ofrezan la carta camuflada en un cómic de Marvel o te traigan la cuenta dentro de una caja de una cinta de VHS (para los más jóvenes os diré que ese era el formáto en el que veíamos las pelis antes de los cd´s y dvd´s). Guiños a la infancia y adolescencia del público objetivo de este garito, pero hablemos de lo que realmente cuenta, la comida.
Como fui a este local recomendado por la fama de sus hamburguesas no pedí entrantes que ‘ensuciasen’ mi objetivo, eso sí, me pedí la reina de su reducida carta, la burguer ‘Homer’, una pieza de carne de 250 gramos que viene con queso cheddar, bacon, cebolla, tomate fresco y lechuga que resultó un verdadero festín. Hay que reconocer que las hamburguesas de este lugar son una bendición. Grandes y bien armadas la calidad de su carne es de primer nivel, envuelta en un pan delicioso, reconozco que disfruté como un niño con cada bocado.
La hamburguesa viene muy bien presentada, acompañada con una pequeña freidora donde están las patatas artesanas (nada de congeladas) y unos bastones de zanahoria frita. También encontramos una salsita de yogur con tiras de pepino, un toque ligero para intentar bajar a semejante coloso calórico. Todo estaba en su punto, rico y con una calidad muy por encima de la media.
Entiendo que alguno se pueda quejar de su elevado precio (13, 80 euros) pero en mi opinión, es una inversión que los amantes de las hamburguesas se pueden/deben permitir de vez en cuando. La cocina del Zombie Bar abre de 12 a 12. Un horario ininterrumpido para un local que se ha ganado por derecho entrar en mi cuestionado ranking. Sus hamburguesas son un manjar que resucitan a cualquiera, incluso a los muertos.
(Consejo: Llamar para reservar antes de ir. También tienen hamburguesas para vegetarianos)
Teléfono:910 11 19 52
Dirección: Calle Pez, 7
Precio: 20 euros por persona
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