Revista Cocina
El helado de mango es un postre exótico y refrescante por partes iguales, de sabor y textura suave. Es conveniente contar con unos mangos madures y de calidad, por lo que si se compran estos fuera de temporada lo habitual es que estén bastante insípidos al haber sido cogidos muy verdes para poder transportarlos desde el hemisferio sur. La temporada del mango nacional va desde mediados de agosto hasta noviembre, por lo que son los meses ideales para aprovechar las muchas recetas que podemos preparar con ellos.
INGREDIENTES:
2-3 Mangos
Azúcar Invertido ( 4 cucharadas)
Azúcar glass (100 gr)
250 gr. de Nata.
250 gr. de Yogurt Griego sin Azúcar.
Leche (un poco)
PREPARACIÓN:
Empezamos pelando los mangos y separando la pulpa del hueso. Trituramos toda la pulpa con la batidora, para ayudarnos le echamos un poco de leche. Cuando esté completamente triturado lo pasamos por un chino o pasa puré para desechar las hebras del mango.
Por último mezclamos la pulpa del mango con el resto de ingredientes. Ojo con el azúcar, he puesto una cantidad aproximada, pero lo suyo es que la vayas echando poco a poco y vayas probando.
Una vez integrados todos los ingredientes los pasamos a la heladera y que esta trabaje. Si no tenemos heladera lo pasamos a una fuente metálica y lo congelamos durante 1 hora, sacamos del congelador y volvemos a batir bien, repitiendo este proceso (congelar 1 hora y batir) al menos 4 o 5 veces.