Dramática historia de amor entre una niña de 12 años llamada Estela y un policía de México. Ambos están involucrados en el tráfico de drogas cerca de la frontera, pero figuran en bandos opuestos. La película fue recibida con entusiasmo por la crítica y se llevó la Palma de Oro al Mejor Director para Amat Escalante. Fue seleccionada también por México para competir por el Oscar a la Mejor Película Extranjera en la edición del año 2014.
Calificación: 6,900.
Tráiler de la Película
Ficha:
Título Original: Heli.
Director: Amat Escalante.
Guionistas: Amat Escalante, Gabriel Reyes.
Intérpretes: Armando Espitia, Andrea Vergara, Linda Gonzalez, Juan Eduardo Palacios, Kenny Johnston.
Productor: Jaime Romandía.
Fotografía: Lorenzo Hagerman.
Música:
Montaje: Natalia López.
Diseño de Producción: Daniela Schneider.
Diseño de Vestuario:
Países: México, Francia, Alemania, Países Bajos (Holanda).
Lugares de Rodaje:
Fechas de Rodaje:
Año: 2013.
Duración: 105 minutos.
Edad: No recomendada para menores de 16 años.
Género: Drama.
Estreno: 22-11-2013.
Distribuidora: Savor Ediciones, S. A.
WEB Oficial: Web Oficial de la película en España, Sitio Oficial.
Puntos Popularidad: 0.
Espectadores: 0.
Recaudación: 0 €.
Crítica:
22-11-2013 – JOSU EGUREN
Violencia y significado
En la primera escena de “Heli” -un cruel diálogo entre planos estáticos en el que la cámara documenta la tortura, asesinato y brutal profanación del cadáver de un joven ante la mirada incómoda del espectador, el jefe de un grupo de sicarios paramilitares y sus futuras víctimas- Amat Escalante concentra las líneas de un discurso idéntico al que se fracturaba en la problemática ambigüedad de la imagen que coronaba “Los Bastardos”, su anterior película.
“Heli” podría ser la contestación a una de las preguntas que se formulaban en “Los Bastardos” (un largometraje filmado bajo la tutela del director francés Bruno Dumont) o el germen de aquella: ¿has estado en el infierno? La respuesta es ‘Sí’, un sí rotundo. El infierno cotidiano, y la violencia extrema y deshumanizadora ante la que los medios y el cine espectáculo reaccionan de una forma sensacionalista, ingenua o pasiva, son el campo de batalla de un director que vuelve su mirada hacia las cunetas de un país sumido en las tinieblas de una guerra en la que nadie presta atención a los gritos de angustia de sus mártires. En “Heli” Escalante afina las claves de un lenguaje que hereda la influencia de sus tutores, Bruno Dumont (“Flandres”, 2006) y Carlos Reygadas (“Batalla en el cielo”, 2005), para afirmar la identidad de un cineasta que aborda el conflicto desde una subjetividad que se revela como la única vía posible para transmitirnos el estado de desconcierto absoluto en el que se sumergen sus víctimas.
Un racimo de planos abiertos que amplifican las secuelas del dolor físico contrasta con los reveladores primeros planos al rostro de unos personajes que desbordan violencia psicológica. Es pura especulación, pero si algo parece advertir “Heli” es la necesidad de devolverle a la violencia su auténtico significado, más allá de las lecturas políticas inmediatas que derivan de un escenario en el que los cárteles narcotráfico tejen redes clientelares con los mil tentáculos de un Estado corrupto.