¡ Que fastidio !. Llevo una semana con dolor en el costado izquierdo, sensación de quemazón en la pierna y con malestar general. Pensaba que debía ser un mal gesto que había hecho en el gimnasio, pero me parecía raro, hasta ayer, que me aparecieron unos granitos en el glúteo. ¡Ya está! pensé.... "esto es un herpes zóster (o culebrilla como se dice vulgarmente)". Así que llamé al hospital y me dijeron que acudiera para estar seguros. Y lo que yo decía, es un molesto,doloroso y pesado herpes zóster. El tratamiento es con aciclovir, un antiviral en forma de pastillas y para el dolor un analgésico como el paracetamol.
Voy a definir un poco lo que es un herpes zóster para el que no lo conozca. Es un virus que provoca una erupción dolorosa y está causado por el mismo virus que causa la varicela. Esto no quiere decir que todo el mundo que ha pasado la varicela vaya a sufrir en el futuro un herpes zóster. Al igual que otros virus tipos herpes, es un virus que permanece dormido después de haber pasado la varicela, y que se puede reactivar después de pasado muchos años. La razón por la cual el virus se vuelve activo de nuevo no es clara.
El herpes zóster vive en el tejido nervioso y puede surgir en el pecho, a lo largo de la espalda y glúteo o alrededor de la nariz y los ojos. En estos casos, el herpes puede infectar los nervios de la cara o del ojo.
Este virus se puede presentar en cualquier persona, pero es más probable que lo pueda desarrollar : una persona con más de 60 años, si tuvo la varicela antes de cumplir un año o (como es mi caso), el sistema inmunitario está debilitado por los medicamentos o enfermedad.
El primer síntoma generalmente es un dolor en un solo lado, hormigueo o ardor, justo lo que me ha ocurrido a mi. El dolor y el ardor pueden ser intensos y generalmente se presentan antes de que aparezca cualquier erupción.
En la mayoría de las personas, se forman como unas manchitas rojas en la piel, seguidos de pequeños granitos que luego forman pequeñas ampollas.
Las ampollas se rompen, formando pequeñas úlceras que comienzan a secarse y formar costras, las cuales se caen en dos a tres semanas.
Algunas veces el dolor puede seguir en el área que estuvo afectada durante meses o años, eso si no se trata el virus; ese dolor se denomina neuralgia posherpética.
A medida que estoy escribiendo el artículo estoy dando saltitos en el sillón, ya que en la zona de la erupción siento como si me estuvieran clavando agujas .
En fin, me toca pasarlo con paciencia y resignación.