En No Solo Viajeros, a lo largo de estos años, hemos podido ver hoteles de todo tipo, pero por el momento no me había dado por publicar acerca de los “hoteles carcelarios”; antiguas prisiones civiles y militares que con el tiempo se han reconvertido en albergues y hoteles de lujo.
Los hay varios repartidos por todo el mundo, de todos los colores y categorías, pero vamos a echar un vistazo a dos de los más llamativos; uno de lujo, y otro que todavía mantiene su esencia original.
Liberty Hotel – Boston, EEUU
Este es uno de los hoteles más lujosos en su categoría. Levantado a mediados del siglo XIX, y operativo como prisión hasta 1990, fue remodelado hasta convertirlo en un lujoso hotel con habitaciones provistas de todas las comodidades que sus antiguos huéspedes, no tenían.
Karostas – Letonia
En este caso no podremos tomarnos martinis mientras escuchamos un concierto de piano. El hotel Karostas es realmente un albergue, en donde los huéspedes pueden alojarse sin perder un detalle de la “decoración” original, con sus literas, grises paredes y “guardias soviéticos” tras las verjas. Eso si, encima es uno de esos hoteles baratos de la ciudad.