Un gigantesco iceberg dos veces más grande que un país como Luxemburgo se acaba de desprender de la Antártida como consecuencia del cambio climático derivado del calentamiento global; al parecer el hecho ocurrió entre el 10 y el 12 de julio de 2017.
El enorme bloque de hielo tiene una superficie de 5.800 kilómetros cuadrados con un peso estimado de un billón de toneladas y con su monumental tamaño en movimiento está modificando el helado paisaje antártico.
La gigantesca grieta empezó a ser visible desde hace unos dos años atrás cuando fue creciendo progresivamente hasta provocar el rompimiento del bloque de hielo que al parecer será llamado por los científicos A- 68; podemos conocer está información gracias a los datos que han arrojado los satélites desde el espacio por esto se sabe que el monumental bloque va moviéndose por el mar de Weddell con rumbo incierto mientras va fragmentándose en enormes pedazos en el océano.
El bloque de hielo puede traer problemas para la vida humana?
Advierten de que este fenómeno transformará para siempre el paisaje de la península antártica pero la preocupación actual es que los trozos de hielo que se están desprendiendo del bloque compacto principal puedan afectar las rutas de navegación ocasionando posibles desastres; según los científicos conocedores en esta materia del proyecto MIDAS encargado de monitorear esta región su eventual derretimiento al parecer no afectará de forma considerable el incremento del nivel del mar lo que daría tranquilidad a las ciudades costeras.
Lo que viene ocurriendo forma parte de una tendencia más amplia que está ligada inevitablemente con los efectos del calentamiento global del planeta que son incrementados por las actividades humanas sobre el mismo.
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