Ideas Románticas En Pareja (Mientras Los Niños Duermen)

Parece un trabajo casi imposible estar dos minutos a solas con tu pareja cuando se tienen hijos. El ritmo del día a día es frenético y apenas os véis. Sin daros cuenta habéis formado un binomio que trabaja al mismo tiempo. El perfecto equipo que rema a la vez pero raramente descansa a la vez.

Y por fin llega esa hora de la noche en la que en casa se escucha silencio. Nada. Esa hora en la que realmente quieres sentarte a leer, tomar una ducha relajante, hacer algo tú, aprovechando que tu pareja se queda “vigilando” que la paz y la tranquilidad siga reinando en casa y que ninguna pesadilla repentina rompa tan preciado y esperado momento.

Es necesario parar y descansar después de un día de locos, de idas y venidas, de cocinar, de recoger, de trabajar, de volver a recoger… Si desde que soy padres no disfrutáis del mismo tiempo para vosotros (porque ya no estáis solos en casa) hoy quiero compartir unas ideas para hacer en pareja cuando la paz y el silencio suenan de fondo.

Cenar con vino

Cenar tranquilamente. Con vino o sin él. Puede ser CocaCola. Pero cenar tranquilamente. Hablando, compartiendo las cosas que han pasado durante el día. Dialogando sobre las preocupaciones de cada uno, si existe algún problema y ver de qué manera juntos se puede solucionar. Reirse. Reirse mucho. Volverse a enamorar.

Netflix

Si cocinar no apetece. El sofá siempre es una opción y Netflix ofrece una cantidad de películas y series para ver juntos. Pedir una pizza siempre es una opción buena. Me pedis una recomendación? La casa de papel, por supuestísimo!

Ver fotos

Plan tranquilo y relajado para hacer desde la cama o desde el sofá. Seguro que en vuestros teléfonos tenéis millones de recuerdos felices que habéis disfrutado juntos. Aquella fiesta en la que os conocisteis o en la que vuestro amigo Ricardo se puso a bailar en calzones encima de la mesa. Bueno, seguramente tengáis más fotos de vuestros hijos en el parque que de vuestro amigo Ricardo en calzoncillos (menos mal!). Seguro que os vais a dormir con buen feeling después de recordar momentos tan bonitos.

Planear las próximas vacaciones

Seguro que desde que ha empezado el año os habéis mandado millones de WhatsApps proponiendo destinos para las próximas vacaciones. Sentarse a planear las vacaciones es reconfortante porque hacerlo dentro de esa paz y tranquilidad que te brinda la noche va a significar el prólogo de esas tan deseadas vacaciones en el lugar que vosotros decidáis en el momento que vosotros decidáis.

Tomar una copa

Y por qué no? Sólo una copa. Sentarse a hablar tranquilamente. De las cosas del día. Recordar cosas juntos. Hacer planes futuros. Seguro que la conversación es tan entretenida que los hielos se derriten y las copas terminan viajando por el fregadero camino del rio (a mi siempre me han dicho que desde el fregadero el agua va al río. Al Pisuerga, exactamente)

Leer en silencio

En el sofá. Vosotros y dos buenas novelas. Disfrutando del silencio. Descansando los cuerpos y alimentando la mente. Parar de leer. Comentar. Abrazarse. Seguir leyendo hasta quedaros dormidos. Si un guionista lee este plan estoy segura que lo incorpora como escena principal en una película melosa-pegajosa.

Un baño de espuma

Nada más que añadir. Todos los planes anteriores dentro de una bañera de agua calentita. Este plan es para los valientes porque seguro que la maldita pesadilla va a despertar a vuestros críos en cuanto vuestro culo toque el agua. Así funciona este juego de la paternidad.

Siete planes para siete días de la semana. No hay excusa. La rutina no es una opción. Hay que ser un poco creativo y dedicar tiempo a uno mismo y a vosotros mismos. Y lo dicho, lo que pase después es asunto vuestro. A disfrutar, románticos!

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