Revista Indie / Folk

Impepinables: Ride – Nowhere

Por Homeboy


Impepinables: Ride – Nowhere

Cuando se habla del Shoegaze se tiende a ensalzar a My Bloody Valentine y a su Loveless como el gran el grupo y el gran disco del genero, aunque algunos no soportamos el segundo trabajo de la banda de Kevin Shields. Yo siempre he preferido a Ride, quizás porque en el fondo su música es más amable y no es tan ruidosa. La verdad es que tampoco tenían mucho que ver, pero ya se sabe como funciona esto de las etiquetas, en las que se mete a bandas muy distintas en un mismo palo. En el grupo de Andy Bell y Mark Gardener la voz no esta en un segundo plano, y a pesar de que el ruido y la distorsión están ahí, siempre encontramos una buena melodía que llevarnos a la boca, y una clara influencia del pop británico de los ochenta.

Como en la gran mayoría de estas ruiodosas formaciones, su carrera fue bastante corta, ya que no llegaron ni a los siete años de vida. Quizás este equivocado, pero creo que esta música tiene una fecha de caducidad muy corta, y a pesar de que dejaron grandes trabajos (Giant Steps, Against Perfection…) estas bandas terminaban repitiendo más que el ajo. Sin ir más lejos, Ride trataron de girar y cambiar el rumbo de su carrera hacia el Britpop en su ultimo álbum, y les salió un trabajo de lo más irregular, por decir algo bueno.

Impepinables: Ride – Nowhere

Sin duda alguna, Nowhere es la obra cumbre del grupo de Oxford. En el dan con la formula perfecta entre el pop, el shoegaze y el indie-rock, y consiguen una de las mejores colecciones de canciones de los noventa. Pocos grupos han conseguido ese perfecto equilibrio entre la calma y la intensidad que tienen canciones como Dreams Burn Down o Paralysed; tampoco es nada fácil hacer puros himnos de pop ruidoso como Seagull, Kaleidoscope, Taste o Polar Bear, y por supuesto que no todo el mundo puede presumir de tener una de las grandes canciones de esa década, si, estoy hablando de Vapour Trail: una autentica joya en la que nos le hace falta tirar de distorsión y ruido para crear una preciosa melodía bajo un mar de cristalinas guitarras, una contundente batería , y un melancólico y estremecedor chelo que te pone los pelos de punta.

Ya que acaban de sacar la edición 20 aniversario, aprovecho y es esta la que os la dejo porque es bastante completa. Incluye la versión completa que salio en la edición en cd (el vinilo solo tenia ocho temas); el Ep que sacaron a continuación, y un directo en Los Ángeles que podéis encontrar aquí.

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