Señores: Acabo de regresar a Virginia tras pasarme una semana entera en el estado de Vermont, famoso por sus políticas izquierdistas, pero su naturaleza preciosa. Dejo aquí mis observaciones sobre Vermont.
Vermont es un estado con poca población. En todo el estado, tiene una población de aproximadamente 645,570 habitantes. Es un estado con mayoría racial blanca y principalmente anglosajona, de orientación política «progre». En casi todas partes tienen carteles políticos tipo «Black Lives Matter», o la bandera homosexual. Incluso, sus iglesias mayoritariamente son de izquierdas. Muchos coches tienen pegatinas que ponen «si eres Republicano, lárgate de Vermont». Debo reconocer que aunque NO comparto, obviamente, esas políticas, sí me gusta que es uno de los estados más «políticos» que he visto en mi vida y en todas partes hay librerías ideológicas donde la gente realmente se apasiona por estos temas.
Me quedé en una preciosa casa colonial en un pueblo que se llama Newfane, que está cerca de una ciudad más importante que se llama Brattleboro. Es tan rural que ocurre como aquí en Virginia con la señal del móvil: no hay. Si usas el GPS, tienes que esperar a bajar la montaña unos 20 minutos antes de que te vuelva la señal. Vermont, en su naturaleza, es precioso. Tiene un aspecto muy parecido a Canadá y partes de Austria o Alemania. Muchas montañas con pinos, forestas tupidas, y enfría bastante por la noche. Varias noches tuve que ponerme chaqueta al salir, y por la mañana se empañaron los cristales porque amanecía a 9 grados.
Brattleboro está a unos 20 minutos conduciendo desde Newfane. La gente de Vermont considera que Brattleboro es un «gueto», pero eso provoca risa. Se nota que no saben lo que realmente es un gueto. Es cierto que Brattleboro tiene un problema con las drogas (COMO TODO EEUU), pero no noté nada «peligroso». Brattleboro recuerda realmente a un distrito de Londres. Los edificios son totalmente de influencia inglesa, como no podía ser de otra manera. El tráfico es una locura. No porque haya muchos coches, sino por el diseño de las calles y los carriles. A veces me confundí bastante y me pitaron (la gente de Vermont es muy agresiva y borde). En Virginia no se pita de esa manera como en el norte, porque se considera mala educación, pero bueno, no me podía esperar otra cosa de Nueva Inglaterra.
Hablando de la gente, pues sí, la fama es cierta: es la gente más antipática que he visto de todo EEUU. A mí personalmente no me molesta, pero claro, después de venir de Virginia, lo notas enseguida. La gente parece muy amargada, enfadada, y no te dan ni los buenos días. Incluso, en varias ocasiones vi que turistas decían «excuse me» para pasar, y fueron totalmente ignorados. En ese sentido, Vermont se parece bastante a gran parte de Europa, donde la gente no sonríe a desconocidos como sí ocurre en estados gentiles como Virginia. No solo son bordes y agresivos, sino que además les gusta discutirte si piensan que tienen razón. No lo digo como crítica, sino observación. De hecho, hay partes de Galicia que podrían ser como Vermont en ese sentido. La gente puede ser muy cabezota, aunque, para ser JUSTO, te ayudan en lo que realmente IMPORTA. Os doy un ejemplo: en un parking público, pregunté a una señora si se tenía que pagar porque yo no encontraba la máquina, y me dijo «sí, aquí se paga»…espera, ¿piensas estar mucho tiempo»? No. «Mira, tóma mi ticket…que me queda media hora y yo me voy». Muy amable. Me gusta mucho que la gente NO es falsa, y sí es cierto que te ayudan si de verdad lo necesitas. Pero sí, existe lo que llaman el «New England shield» (escudo de Nueva Inglaterra) y eso significa que por lo general, no son muy de hablar o sonreír a desconocidos. Son más bien desconfiados y no esperes que sea como otros sitios de América donde si te ven con un mapa en la mano se acercan a preguntarte si necesitas ayuda. La gente de Nueva Inglaterra, y eso incluye a Vermont, es mucho más reservada y calladita que el resto de EEUU.
La comida: se come estupendamente bien, porque la gente se toma muy en serio la denominación de origen y solo les gusta comprar productos locales de Vermont. Es el único estado de USA en cuya capital NO tienen un Mcdonald’s. Solo tienen 4 Mcdonald’s en todo el estado. En general, está mal visto comer comida de «cadenas» nacionales y les gusta mucho los productos frescos. Tampoco tienen supermercados cadenas. Tienes que ir a la «country general store» como si fuera el siglo XIX. En las tiendas de campo es donde te venden el periódico, y llegas a conocer todo lo que pasa en tu pueblo. Tienen un sentido comunitario mucho más fuerte y eso sí me gusta (es herencia de sus ancestros los PURITANOS). En Vermont, TODO se discute…incluso discuten en los «council meetings» si puede abrir una tienda nueva en el pueblo o no, otra herencia de los puritanos.
Por lo general, el «ambiente» es sombrío y gris en las ciudades de Vermont como Brattleboro o Burlington. Yo no llegué tan al norte como Burlington, pero es más o menos igual en todo el estado. La zona sur del estado, que es donde estuve, es más rural y pobre, pero además «gris». Hay muchos puentes cubiertos y son muy bonitos e históricos. La mayor parte del estado está rodeado de rios, y lagos. No obstante, no tienen playa. En la casa colonial donde me quedé, había un riachuelo detrás y el sonido que hacía era increíble para la paz y el bosque. Me parecía estar en el cuento alemán de Hansel y Gretel en la casa de la bruja.
Delincuencia: a pesar de lo que dicen los «vermonters», apenas hay delincuencia. Normal, el estado es casi 100% blanco. Lo cierto es que la mayor parte de la delincuencia en EEUU es cometida por negros y personas de origen latinoamericano en general, que son muy parecidos a los negros en su perfil socioeconómico: normalmente apenas han terminado la secundaria, tienen muchísimos hijos (desafortunadamente), y por lo general, tienen un nivel intelectual y de inteligencia inferior a blancos, judíos y asiáticos. En Burlington han impuesto colonias de negros de Somalia, alentados por los progres, y están provocando delincuencia que jamás se había visto en Burlington, pero bueno, ellos se lo merecen porque es lo que vota la gente de Vermont. Son más «papistas que el papa». ¿Qué se puede esperar de un estado cuyo senador es BERNIE SANDERS?
Noté que a diferencia de Virginia y otros estados del sur, nadie te dice «sir» o «ma’am». Los vermonters no creen en jerarquías de ese tipo, y nadie viste formal. De hecho, si te ven vestido muy formal, te ven como «pretencioso» o «elitista». Para ser justos, siempre han sido así y lo respeto. Pero, ¡qué diferencia con los Virginia «gentlemen!»
Impuestos y armas: los impuestos en Vermont son altísimos y el coste de vida es carísimo, como todos los estados donde gobierna la izquierda. Sin embargo, las leyes sobre armas son casi tan libres como Virginia. Nada que ver en eso con otros estados progres como Nueva York o California.
Casi todas las actividades en Vermont están relacionadas con el aire libre y el campo. Otra cosa positiva es que casi no tienen carreteras enormes con muchos carriles como en zonas más urbanas. Virginia tiene más diversidad de actividades, pues existen actividades de campo, pero también de ciudad o pueblo.
En general, me gustó mucho sus pueblos pequeños y su fuerte sentido de identidad estatal. Están muy orgullosos de su estado, y eso es positivo. Con todo y eso, yo personalmente no viviría en Vermont. No me gustaría sufrir sus inviernos grises y gélidos (el invierno dura desde noviembre a veces hasta mayo). Tampoco me gusta el sentido político ultraizquierdista del estado ni sus impuestos. Aquí van algunas fotos. La primera son las vistas desde el porche de la casa de campo donde me quedé solito con mi pistola.