¿Alguna vez habéis sentido unas ganas irrefrenables de orinar antes de hacer un examen, ir a una entrevista de trabajo, cuando se tiene que hablar en público, etc.? Uno de los síntomas físicos que podemos experimentar ante una situación que nos provoca estrés y nervios es la necesidad de miccionar. Éste es también uno de los diversos factores que pueden ocasionar incontinencia urinaria en los niños, puesto que además ellos no tienen un control completo de sus esfínteres.
La mayoría de los niños desarrollan la capacidad de controlar sus esfínteres alrededor de los 3 años, y hasta los 5 años se considera normal que tengan algunos momentos de incontinencia urinaria o enuresis. De hecho, según Fernando González-Chamorro, jefe clínico del Servicio de Urología del Hospital San Rafael de Madrid, por lo general se considera normal mojar la cama (enuresis nocturna) de vez en cuando hasta los 7-8 años. Hay que tener en cuenta que la enuresis va desapareciendo conforme el niño va creciendo y va aprendiendo a sentir las ganas de hacer pis y a controlar el vaciado de la vejiga.
La incontinencia urinaria en los niños puede estar causada por factores fisiológicos, como un desarrollo físico interno más lento que provoca que el tamaño de la vejiga sea más pequeño y se contraiga más a menudo y de forma involuntaria, o por algunas circunstancias emocionalmente críticas para el niño, como el nacimiento de un hermano, algún cambio importante o los primeros días de clase. Orinarse antes de ir al cole cuando ya se ha logrado controlar este reflejo es una manifestación que el niño se siente estresado y nervioso ante esta situación.
Cuando esto sucede, es importante que los padres brinden a sus hijos todo su apoyo, comprensión y paciencia para ayudarlos y contribuir a que no se sientan mal. Hablar con ellos, explicarles como funciona su cuerpo, animarlos y ser positivos es fundamental para fomentar su autoestima.