Independiente obró un milagro en la altura de Quito: convirtió dos goles claves perdiendo 3-0 y si bien terminó siendo derrotado por la Liga, se trajo un gran resultado de cara al encuentro de vuelta correspondiente a una de las semifinales de la Copa Sudamericana.
La altura pareció no ser un impedimento y hasta el primer tanto, marcado por Juan Manuel Salgueiro a los 43 minutos de la primera parte, Independiente gozó de muy buena salud.
Antonio Mohamed quitó del equipo a Patricio Rodríguez para incluir a Fernando Godoy y con tres volantes de contención, a los que por las bandas se sumaron Cabrera y Mareque, el “Rojo” mantuvo el orden y fue muy inteligente para ocupar con acierto cada espacio libre, entorpeciendo permanentemente el fluido circuito que la Liga suele tener de mitad de cancha en adelante.
El cuadro ecuatoriano, con Patricio Urrutia muy marcado y sus volantes externos –Reasco y Chila- con muchísimas dificultades para progresar con el balón en sus pies, casi ni se acercó con peligro al arco defendido por Navarro –Luna desperdició la mas clara al no poder conectar un centro desde la derecha de Barcos-.
Independiente dispuso mucho tiempo del balón –clave Battión, de gran actuación- y si bien le faltó profundidad, jugó el encuentro bien lejos de su arquero. Su única chance clara la tuvo a los 30 minutos, con Godoy estrellando un bombazo en el travesaño.
El golazo de Salgueiro, no obstante, llegó en el momento menos pensado y en desventaja, Independiente se vio obligado a arriesgar. Lo pagó. Siete minutos de desatención, parecieron conducirlo al infierno. Bolaños, quien ingresó por Luna, convirtió a los 49 y Reasco lo hizo a los 56.
Un minuto después y con Independiente al borde del KO, apareció Silvera. El “Cuqui” recogió al borde del área la asistencia de Parra y en fuera de juego, ajustó su derechazo junto al poste izquierdo de Ceballos.
El once de Mohamed revivió. Las caras de frustración y desencanto desaparecieron. La energía fluyó nuevamente y con Liga intentando digerir el inesperado descuento, Mareque asestó otro golpe.
El ex River recibió de Battión y recostado sobre el costado izquierdo, disparó a colocar –con su pierna derecha- y la colgó del ángulo izquierdo de un Ceballos que nada pudo hacer.
Independiente recobró la memoria y manejó los tiempos del encuentro como en el primer tiempo. Tuvo el balón y contó con alguna chance aislada para igualar.
Navarro se vio obligado a intervenir y por dos veces, para repeler el cabezazo de Barcos y el posterior remate de Lara. Fue esta, la ultima ocasión realmente clara de gol con la que contó la Liga.
Independiente, serio y ordenado, terminó resistiendo los embates finales de un equipo desesperado y se trajo un resultado valiosísimo. Haberlo hecho a 2.850 metros de altura y frente al mejor equipo del continente, tiene mas merito aun. La final esta más cerca.
Los goles del encuentro:
Puzzle Bobble
Karate Blazers
Puzzle De Bloques
Magical Cat Adventure