Tres asociaciones de realizadores cinematográficos iniciaron acciones legales contra Ralph Haiek y otras autoridades del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales bajo el segundo tramo del gobierno de la alianza Cambiemos. Incumplimiento u omisión de los deberes de funcionario público, falsedad ideológica, malversación de caudales públicos son algunas de las expresiones utilizadas en las presentaciones que recayeron en los Juzgados en lo Criminal y Correccional Federal Nº 4, 6, 7, 8 de la Ciudad de Buenos Aires, a cargo respectivamente de los magistrados Ariel Lijo, Rodolfo Canicoba Corral, Sebastián Casanello y Marcelo Martínez de Giorgi.
En el comunicado que enviaron esta tarde por correo electrónico, Documentalistas de Argentina (DOCA), Directores Independientes de Cine (DIC) y la Asociación de Productores y Realizadores Independiente (APRI) enumeraron tres violaciones a la Ley de Cine: no se otorgó un solo crédito de fomento en los últimos dos años; no se destinó el 50 por ciento de la recaudación en salas a los subsidios contemplados para producciones nacionales; no se cumplió con la Cuota de Pantalla. Tampoco se observaron los parámetros mínimos de transparencia en la gestión pública.
Los jueces Lijo, Canicobal Corral, Casanello, Martínez de Giorgi.El texto nombra al ex presidente y al ex gerente general del INCAA, Ralph Douglas Haiek y Juan Francisco Victorino García Aramburu. También alude a «otros gerentes y funcionarios» implicados en los actos que los demandantes presumen delictivos. A las faltas mencionadas se suman otras: elusión de licitaciones obligatorias, incumplimiento de normas vinculadas con el buen desempeño del Consejo Asesor, tramitación ilegítima del presupuesto.
En su edición de hoy Página/12 publicó esta entrevista que Luciano Monteagudo y Oscar Ranzani le hicieron al flamante presidente del Instituto de Cine, Luis Puenzo. El también realizador sostuvo que desde ese lugar tuvo «muy malas experiencias» que «certifican y confirman» el testimonio de otros colegas. «Hay un sentimiento de que el INCAA funcionó muy mal, particularmente desde esa trapisonda que le hicieron a Alejandro Cacetta».
Puenzo adelantó su intención de auditar la gestión anterior. Luego amplió: «No quiero subirme al decir de algunas entidades que han acusado subejecución presupuestaria. Hay gente aquí adentro que sostiene que no, y la verdad es que yo no lo sé. Lo quiero saber, me importa muchísimo y lo voy a saber».