‘Insidious: Capítulo 2′– El show de Wan

Abuela….hay alguien de pie detrás de ti…

(Dalton Lambert)

Josh y Renai Lambert, después de los  extraños y trágicos sucesos paranormales que han acosado a su familia, deciden  mudarse con sus hijos a casa de la madre de Josh. Un cambio de aires necesario para buscar la paz e intentar olvidar lo antes posible el infierno que han sufrido. Pero, para su desgracia, los Lambert se verán asediados de nuevo por extrañas e inquietantes presencias  que perturbarán su tan ansiada paz. La familia deberá estar más unida que nunca para hacer frente a unos fenómenos que esconden tras de sí un oscuro secreto repleto de maldad y de muerte.

Hoy estoy-soy-un pelín haragán, y no quiero parlotear más de lo que sería justo y necesario,pero no me malinterpretéis, pues esta hebria y placentera holgazanería que se me antoja no es fruto de un capricho navideño, no, nada más alejado de la realidad, simplemente quiero mostrarme práctico, ahorrador y no dar demasiado bombo a un buen filme, que a pesar de atesorar no pocas virtudes ha pecado de una insultante pereza y de una mansa cobardía, algo que sin duda resulta un grave menoscabo y me quita muchas  ganas de chacharear todo lo que me hubiese gustado sobre esta tan pusilánime como amena cinta.

Fácil, acomodadizo y rápido para mí y para vosotros-sufridos y queridos lectores- sería no meterme en camisas de once varas y decir-algo que seguramente sería lo correcto- que nos encontramos ante una obra entretenida y digna heredera de su honesta predecesora, y no estaría mientiendo, porque así es. Pero también es cierto que Wan-seguramente espoleado por el asombroso éxito de la primera entrega- se ha dejado llevar un poquitín por  la euforia y se ha acurrucado bajo las alas del conformismo, aprovechándose al cubo de las virtudes del filme original y de los tropecientos tics del sub-género, algo que me parecería lícito si se tratara de otro realizador con menos dotes, pero de James Wan espero algo más.

Sin duda estamos ante un producto entretenido y coherente con lo anteriormente visto,  pero demasiado excesivo y atropellado de lo que se esperaba. También es cierto que si en algo supera esta digna secuela a su predecesora es en dinamismo,eso es innegable, lo de “Capítulo 2″  en el título no es un sinsentido ya que el filme empieza exactamente dónde terminó la primera entrega. Y eso aunque acucia de forma fullera al realizador, también le permite ir directo al grano sin perder necesario tiempo en insulsas presentaciones ni en introducirnos en una crónica que ya conocemos de sobras.

Y si hay algo que no se le puede reprochar a esta cinta es su generosidad para con el espectador; Wan, con una narración dadivosa y agradecida intenta mantenernos pegados a la butaca desde el primer minuto hasta el último ofreciéndonos un vertiginoso carrusel de sorpresas y apariciones que, al principio, trabajan a favor de una trama que promete mucho, pero que poco a poco se va desinflando, aunque-afortunadamente-la cinta no llega a perder ese extraño encanto y esa atractiva  sensación de tensión que tan bien funcionaron en la aterradora y talentosa primera entrega.

Y si tenemos en cuenta la forma de rodar y de narrar tan magnéticas, tan elegantes y tan sencillas que tiene el prometedor director malayo, fácil es dejarse arrastrar hacia el disfrute y mostrar interés por lo que se está cociendo en casa de los Lambert, y más aún si nos encontramos ante un relato con unos personajes tan bien dibujados, amén de la comodidad que supone  conocer a éstos y sus entresijos al dedillo. Pero si encima nos obsequian con algún que otro susto de vez en cuando, un cúmulo de sorpresas marca de la casa, y unos alivios cómicos la mar de bien jugados, pues mejor que mejor. A nadie le amarga un dulce.

Como amante permisivo que soy de este denostado género me he dado cuenta de que nunca me llegan a molestar tanto los clichés como para juzgar y condenar una obra, por muy excesiva y reiterativa que ésta sea. Y creo-seguro estoy de ello- que hay tics que no tan sólo son necesarios en un género, sino que son del todo inamovibles-no me dedicaré enumerarlos porque ya lo he hecho en multitud de ocasiones-pero una cosa es ser tolerante y otra cosa muy diferente es ser gilipollas. No me parece nada mal que Wan recurra a los estereotipos de un sub-género que en gran parte vive y sobrevive gracias a su pleonasmático conservadurismo, pero este mago del horror puede ofrecernos mucho mas de lo que aquí nos da. El placentero recuerdo-demasiado reciente- de ese portento llamado ‘Expediente Warren: El Conjuro’ juega en contra de ‘Insidious: Capítulo 2′ que sin duda pierde muchos enteros al ser comparada con una cinta, de temática similar y del mismo director, que sin ningún atisbo de duda se encuentra entre una de las mejores películas de horror de la última década, que no es moco de pavo. Y compitiendo contra uno mismo nunca se suele  ganar, aunque a veces lo parezca.

Los actores están todo lo correctos que se podía estar, sin alardes, pero con ganas. Subyugados a un libreto algo abigarrado pero muy complaciente para con el espectador. Amén de una trama que además de ser muy sugerente y eficaz a los ojos del tolerante e indulgente amante del género, está  repleta de guiños, homenajes y referencias a algunas de las obras más representativas y míticas del cine de terror sobrenatural, algo que resulta de lo más reconfortante para el avispado cinéfago que quiera jugar a adivinar; Un espectador que fácilmente encontrará paralelismos con obras tan importantes como ‘Poltergeist’-evidente la influencia de ésta-, o ‘Los otros’-muy clara también su parte de culpa en este show-, o incluso hallaremos la impronta de thrillers mucho más “realistas” y alejados de lo “paranormal” como pueden ser ‘Seven’ o ‘El silencio de los corderos’, algo que resulta tan interesante y embriagador como pusilánime y efectista. Todo ello dando como resultado  un filme que se antoja entretenido, elegante, y bien narrado, pero demasiado  atolondrado y cobarde como para que su visionado nos parezca una experiencia tan gratificante como lo fue el de la estimulante primera entrega. Todo apunta a que ‘Insidious’ acabará siendo una trilogía-o puede que algo más- ya que ha sido todo un exitazo de taquilla, pero sea quién sea el realizador de la siguiente entrega deberá esforzarse mucho si quiere igualar o superar los resultados de estas dos cintas, que no son nada originales en cuanto a las formas, todo sea dicho.

No os mentiré, a pesar de todo,me ha gustado ‘Insidious: Capítulo 2′, pero no quiero darle motivos a James Wan para que se duerma en los laureles, ya que espero mucho más de él. Aunque admito que si no sois tan tiquismiquis como yo, os lo podéis pasar de puta madre viendo esta cinta,  y más si estás bien acompañados y con el gaznate bien regado por nuestro espumoso y dorado elixir de dioses. Pero repito lo dicho: había ingredientes suficientes para sacar un plato mucho más jugoso del que finalmente nos han ofrecido. No perdamos la esperanza, quizá la tercera entrega supere a ésta y sacie nuestra hambre, de James Wam podemos esperar lo mejor, pero mucho me temo que Wan nos dejará con la miel en los labios y hastiado de tanta fantasmada cederá el testigo a otro, seguramente menos talentoso. O puede que no. Ya veremos. Felices fiestas, cinéfagos.

Sayonara.