Ciertamente, Watson y su acceso a internet para profundizar en una materia dada en cuestión de segundos y sus noventa servidores que soportan su magnífica inteligencia artificial (si, yo también sentí envidia al escribir esto...) pueden ayudar en una de las tareas típicamente difíciles a la hora de afrontar el procesamiento de grandes cantidades de información.
El problema de la exploración; y es que, cuando se busca conocimiento en un enorme mar de información, se puede proceder de dos maneras, la primera, valorando la amplitud del conocimiento sobre la profundidad del conocimiento (como saber algo de economía y algo química, pero no tanto como un especialista en ninguna de las dos) mientras que la segunda sería exactamente lo opuesto, es decir, valorar la porfundidad del conocimiento sobre su amplitud (como saber mucho de química y nada de economía); Watson parece tener ambas, una amplitud de conocimiento, en teoría tan basta como la red, y una gran capacidad para profundizar en un tema 'sobre la marcha'.
Si el experimento funciona, Watson podría ayudar al médico a realizar diagnósticos tomando como entrada los síntomas del paciente, y comparándolos no sólo con su poderosa base de datos sino también obteniendo información de revistas especializadas con lo último en investigación en la red y de la blogósfera.
Durante los últimos años Chase y dos de sus estudiantes han realizado pruebas con Watson, haciendo preguntas y navegando entre las respuestas que les devolvía, sin buscar realmente una respuesta 'verdadera', sino cuatro o cinco respuestas probables, ya que en medicina, como en muchas otras actividades humanas, las respuestas suelen ser muy locales, no universales.
Bienvenidos, a la singularidad.
[Fuente| Universidad de Columbia]
[Vía| Medgadget]
via ScribeFire
LOS COMENTARIOS (1)
publicado el 31 octubre a las 14:23
Muy buen post, impresionante lo que avanza la ciencia.