Ayer posteaba, traducido, el artículo del Gran Maestro del GODF, Guy Arcizet, referido a lo virtual y la soledad. Hoy, traduzco uno de los comentarios –firmado por Louis-Marie Sourisseau- realizados al post. Puede entenderse como contrapartida o acaso, más bien, como necesario complemento. En cualquier caso, yo diría que inseparable del artículo de Arcizet.
“Mi muy querido Hermano,
Un cáncer me ha obligado a retirarme durante cierto tiempo de la vida activa de mi Logia; he podido mantener contacto con mis Hermanos gracias a la informática, que se ha revelado no como tú dices, un factor de aislamiento, sino muy al contrario una calurosa cadena de unión que me ha ayudado mucho en mis pruebas.
Tengo 72 años y vivo en el campo a 30 kilómetros de mi Taller; estaría ciertamente obligado próximamente, tras una treintena de años de masonería en diversos Orientes (entre ellos Saint Nazaire, Bayonne, Nantes, Rueil Malmaison, etc, etc) a quedarme en casa. Espero continuar compartiendo con mis Hermanos y Hermanas de todas las Obediencias el mayor tiempo posible, no te apures pues algunos de estos Hermanos se encuentran tan aislados o impedidos como yo y son, ay, a veces incluso más ancianos que yo.
Por otra parte, habiendo sido trasladado varias veces en mi trabajo, la informática me ha permitido mantener el contacto y rencontrarme con Hermanos y Hermanas de Orientes muy lejanos.
Por descontado, leo blogs de desiguales calidades, pero después de todos estos años de masonería, aunque sigo siendo un simple aprendiz, he aprendido con toda humildad a seleccionar y discernir las aportaciones inútiles o simplemente sin interés”.
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