París, 1910. Maud es una inglesa que estudia pintura en una academia para mujeres. Para conseguir dinero es contratada para dar clases a Sylvie, hermana de Christian Morel, ambos jóvenes y ricos. La modelo Yvette y la rusa Kolstova completan el elenco principal de esta historia. Lo que comienza como una tranquila narración de época, bien ambientada y de estilo cuidado, se transforma pronto en una acelerada sucesión de aventuras, robos e intrigas. Los Morel tienen un pasado y las protagonistas pagarán caro cruzarse con ellos.
Engaños, traiciones, amistad, crueldad, sordidez y sorpresas se suceden sin respiro. La pátina cultural que Robertson quiere dar al libro (París opulento, Belle Époque, el mundo del arte y la bohemia) apenas oculta una comercial y fatigosa historia digna de Rocambole, fluida y con buen ritmo narrativo, pero excesivamente larga y sinuosa.