Al escribir puedo usar varias palabras o cursis expresiones para referirme al orgasmo: acabar,
climax, thebig “O”, estallido de placer, la pequeña muerte, entre tantas otras. Pero en el momento de la acción, ¿cuál sería la expresión apropiada para decirle al otro que “llegó el momento”?Usualmente y dada mi experiencia con mis coterráneos, en Chile se usa la expresión “irse”, pero nunca me ha gustado. “Ya me voy, ya me voy…” o “¿quieres irte?” No, no, ¿irse dónde? Si yo me quiero quedar aquí contigo y tener mi orgasmo. Es como si estuvieras echando a la persona de tu cama aniquilando todo el momento. Dado que no me gusta esta expresión, prefiero usar el “acabar”, pero siento que tampoco es tan precisa. Es demasiado utilitaria. Haces algo lo terminas y ya, no necesitas más porque ahí “acabó” el acto, pero ¿qué pasa con el post-coito? Esa también es una parte importante del acto sexual, la cosa no “acaba” en el orgasmo. Así que simplemente he optado por algo más simple que es usar el “ahora”. “Ahí, ahí, aaahoooraaa…” Pero cuando avisas sobre la marcha a veces se hace demasiado tarde, además, no todos los especímenes masculinos logran entender el abstracto y debo finalizar mi frase diciendo: “Ahí, ahí, ahora, acaba conmigo” y así, de vuelta a la discusión lingüística de cómo dar la señal.
Hace un par de días fui a bailar salsa y conocí a un colombiano, originario de Cali, residente en Nueva York y de paso por Santiago. Entre tanta cuidad igual la cosa terminó en su hotel, más específicamente, en su cama. Cuando llegó el minuto del clímax, esta vez fue él quien tomó la iniciativa de darme la señal para hacerlo juntos: “Vente, vente conmigo”. Nunca había usado esa frase, pues sentía que también carecía de precisión ¿vente? ¿y a dónde quieres que vaya? Pero al escucharla con su exquisito acento mi percepción cambió. Es como si fuera una deliciosa invitación a alejarnos del mundo, a vivir esa milésima de segundos juntos, a compartir el placer y el goce de ese instante. Recuerdo ese momento y su voz resuena en mi cabeza “vente, vente conmigo”. Sí Caleño, con usted me voy a tener ese orgasmo, a Colombia, a Estados Unidos o donde quiera llevarme.