Isaac Cordal, ciudadanos del cemento.

Este artista urbano de Galicia es el creador de pequeñas esculturas de cemento que recrean escenas y temas reales de la sociedad actual como el fracaso político, el cambio climático, la falta de libertad de expresión… y lo hacen invadiendo pequeñas grietas de la calle, charcos, andenes y otros lugares de ciudades como Barcelona, Londres, Amsterdam o Bruselas y convirtiendo, de esta forma, las calles en galerías, así nos encontramos otra vez delante del arte que sale a la calle a buscar a la gente.

Estas pequeñas escenas efímeras forman parte de la serie “Cement Eclipses” y de esta forma, el artista,  expresa los miedos, temores, y sensaciones de los habitantes de estas ciudades de cemento.

Anteriormente su obra estaba basada en el modelado de alambre y las sombras  inmateriales como capacidades representativas del cuerpo humano, dejando paso al cemento, material industrial que representa la huella del hombre en el entorno natural.

Estas esculturas de tamaño reducido son el punto de partida para estas intervenciones urbanas que dan origen a una producción fotográfica y audiovisual en forma de exposición.

Normalmente las esculturas que encontramos en las calles son grandes figuras hechas de materiales nobles, mostrándonos la grandeza de sí mismas, pocas veces estas esculturas urbanas se nos muestran divertidas y fáciles de entender e interpretar, acostumbran a honrar la memoria de algún gran personaje, y pocas veces representan los que realmente encontramos en las calles, a los auténticos ciudadanos anónimos.

Cordal retrata a perturbados hombres de negocios, indigentes esperando un cambio en la sociedad, a amas de casa… Figuras que acarrean el peso de vivir en la gran ciudad y se detienen un instante a reflexionar sobre todo lo que les rodea.

Las figuras de cemento se integran en el paisaje urbano abandonando su papel de ciudadano y mimetizándose con la ciudad convierténdose en parte de ella.  Es un homenaje al ciudadano común. Hombres que confirman su aislamiento voluntario, camuflándose en las aceras, las calles, los charcos, las paredes.

Segun el mismo Cordal explica:

“El cemento es uno de los materiales que más traicionan nuestra relación con el entorno que nos rodea. Es la huella del ser humano en el escenario natural, nuestro trazo más reconocible. Una marca que nos invita a creer que la naturaleza es “eso” que vemos en el trayecto que lleva de una ciudad a otra. En el caso de Galicia, que es el lugar de donde yo provengo, la costa se ha transformado en un alargamiento de la ciudad prolongado sin fin. Uno de los puntos de referencia para llevar a cabo estas figuritas fueron aquellas impactantes imágenes del 11-S en las que aparecían muchos ciudadanos que, cubiertos por el polvo y los escombros, quedaron por unos momentos convertidos en parte del mobiliario urbano.”

Micro relatos que encierran grandes dosis de humor, dramatismo y crítica y nos muestran la complejidad humana y el papel del hombre en la urbe de una forma muy sencilla pero efectiva.

Como siempre os invitamos a visitar su página web dónde encontraréis más imágenes de su trabajo: http://www.isaac.alg-a.org/