Terminando el año 2011, ufff...que rápido ha pasado el tiempo, parece que mientras mas años tenemos, el tiempo se nos va como el agua entre los dedos.
Les debo varios finales de cada una de las historias que me ha presentado el camino, el camino de mi vida. Yo las tomo.
Se han dado cuenta que hay veces que todo conspira para que algo se lleve a cabo, en un determinado momento, con una determinada persona, en un determinado lugar.
Parece que todo el universo se pone de ese lado para que ese algo resulte.
Mas que comprobado.
Hubo varias pruebas que tuvimos que pasar, y cada una de ellas era difícil por que todo hacía prevalecer que no podríamos.
Pero el destino estaba de su parte, no se pudo cambiar.
Habrá sido el poder de la fuerza de nuestros pensamientos en que yo digo, querer es poder, quisimos y pudimos. El norte, el centro y el sur, juntos con un pensamiento positivo en bien de una perrita abandonada o perdida, vagando por las calles de la Pintana.
Se acuerdan de Jaka?, aquella perra poodle abandonada, que se puso en frente de mí en una de las calles de la comuna La Pintana. Pues bien para todos aquellos que estuvieron preguntando en facebook, a mi correo o a mi celular, aquí va la respuesta.
A los días de dar a conocer su vida miserable en el abandono, luego de habersela robado a las calles que la vieron pasar casi arrastrándose por que no se podía los huesos en su estado avanzado de desnutrición, me escribe una amiga desde Antofagasta, pidiendómela en adopción para su prima en Talca. En Talca!...
Luego de conversarlo, pensarlo una y otra vez, llegué a la conclusión que sí. Jaka era para esa persona.
Los detalles del por que me los voy a guardar. Solo que ese por que, que vió mi corazón, no se equivoca.
Jaka, llegó a mi casa el 10 de agosto, pesaba alrededor de cuatro kilos, estaba en un estabo deplorable de sarna, desnutrición y abandono. Los primeros días fueron de un cambio radical a lo que ella conocía, a medida que pasaba el tiempo, empezó a tomar confianza en ella misma, ya caminaba, algo corría. Fueron casi tres meses que estuvo a nuestro lado, donde le enseñé a confiar, la devolvimos a la vida, y por sobre todo devolvimos su dignidad animal denigrada por los humanos, abandonada en las calles.
Aquí un recuerdo entre triste y maravilloso, una prueba de su estadía a nuestro lado, pueden observar como va cambiando la mirada a medida que pasaba el tiempo. Sigan las imágenes numeradas para que verifiquen lo que les escribo.
No es fácil decidirse robar perras sarnosas, que están abandonadas de las calles.
No es llegar y hacerlo.
Antes hay que pensar en que tete nos estamos metiendo si tenemos nuestras propias mascotas, pero si lo sabemos hacer, y hacerlo bien, no es tan difícil tampoco.
Muchos dirán que es caro hacerles tratamiento.
Hay que tener las ganas de querer ayudar, y un pequeño espacio separado del lugar de tus perros para evitar futuro contagio de la enfermedad. Gracias a Dios, y a mi experiencia, lo se hacer muy bien. Y quién quiera aprender, que me pregunte, yo le enseño hacer de su vida mas significativa de lo que ya es.
Cuando ya estaba recuperada de su sarna por completo, la llevé a esterilizar.
Fíjense en el peso que marca la balanza. Mas que el doble de su peso inicial.
La dejo por la mañana en la clínica para retirarla por la tarde. Siempre siento temor con cualquier cirugía a la que se exponen nuestras mascotas, pero confiando en Dios, todo bien.
La paso a buscar cerca de las seis de la tarde, me la entregan aún dormida. La envuelvo en aquella manta de lana que me tejió en aquellos años mi madre. Está sagrada de tanto arropar perros, y bendita de tanto amor. La acomodamos en una caja transportadora, abrigada para evitarle que sienta frío. El día está cálido.
Será que soy demasiado aprensiva con lo que quiero, que aun siento en mi estómago un sonido de tripas que ni les cuento. Llegamos a casa, solo espero que esté bien.
Al día siguiente este es su semblante, disfrútenla:
Es hora de separarnos.
Jaka se despidió de todos mis perros, la pena de separarnos empieza a embargar mi pensamiento. Preparamos viaje y partimos a la ciudad de Talca, la misma ciudad que hace mas de un año fui a dejar a Antonio.
Su nueva dueña estaba ansiosa esperando, había estado esperándola desde que supo que existía, fue un viaje tranquilo y relajado, solo nos detuvimos para que ella estirara sus patitas. Llegamos a su nuevo hogar, Gabriela la estaba esperando. Fue increible ver la química que en ellas existía, como si se hubieran conocido toda la vida.
Vean este video, Jaka recorriendo el terreno que desde ese día en adelante sería su nuevo hogar.
Que mejor regalo para terminar este año para todos aquellos que preguntaban a mi correo, o por facebook que había sido de Jaka. Fue adoptada por Gabriela, actualmente vive en Talca.
Mis agradecimientos especiales a la señora Soledad de Antofagasta, y por supuesto a Gabriela que la acogió desde un principio en su corazón.
Historias como estas son las que hacen que continué robándole los perros a las calles. La verdad verdad, que ya me considero una verdadera delincuente.
En la vida, todo es amor.
Si uno ama está vivo, si crea amor,
las cosas buenas forzosamente llegan.
Esta es una prueba mas de que estamos vivos.
Marcela Opazo.
Los perros del camino?... son todos aquellos que de una u otra manera estando perdidos o abandonados, Dios los pone en mi camino cuando paso...y algo me dice: tienes que detenerte, no puedes seguir...