Vaso cerámico de la cultura íbera. s. II a.C.
La pieza tiene una datación en torno al 250-150 A.C. y está considerada uno de los descubrimientos más importantes de esta década.
El emplazamiento de la necrópolis no se conoce aún, pero se especula que podría situarse en las cercanías de la ciudad de Alcoy. Las pesquisas que llevan a cabo miembros de la Guardia Civil se centran sobre las declaraciones que manifieste el anticuario detenido.
El valor añadido de esta pieza se encuentra en que además de encontrarse entera, contiene una serie de dibujos simbólicos, que muestran escenas de caza. Un miembro, presumiblemente de la nobleza, con una falcata (espada íbera) en su mano, se enfrenta a un jabalí con la ayuda de otros dos guerreros y un perro.
Para José Luis Simón, experto de Patrimonio Arqueológico de Alicante, el descubrimiento es de suma importancia, pues según sus palabras: "Como no podemos conocer la cultura ibera a través de su escritura, porque no hemos podido descifrarla, para nosotros este descubrimiento es como escribir un capítulo de la Ilíada. Si Homero hablaba de las gestas de Aquiles y Héctor, la cultura ibera tenía sus propios héroes, aunque no sepamos sus nombres"
También se especula que el noble representado procediera de la sierra de Alcoy, pues la iconografía es similar a la del Vaso de los Guerreros del yacimiento de La Serreta, próximo a Cocentaina.
Fuente e imagen: abc.es
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