El surfista canario Jonathan González ha ganado la última edición del Nixon Surf Challenge, celebrado en el Mar de China.
El surfista recibió la mayor puntuación de los jueces, alzándose como campeón. Aunque está más familiarizado con las olas vascas, la zona en la que González obtuvo su primera victoria hace ya más de una década, ha logrado ganar esta edición, que se celebró en el paraíso tropical y urbano de Hainan. Esta localidad en el mar del sur de China, es conocida como el corazón de la rápida expansión que está experimentando la industria del surf en el país. Además, esta edición contrasta con las anteriores, que se ubicaron en aguas frías como las de la península rusa de Kamkatcha e Islandia.
Según declaró William Aliotti (surfista francés ganador de la edición anterior): “Kamkatcha siembre iba a ser un hito difícil de igualar, pero Hainan tiene aún mucho potencial por descubrir. He oído cosas impresionantes acerca de la isla, pero nunca he tenido oportunidad de ir —será la primera vez para prácticamente todos los que viajamos, lo cual es bastante sorprendente, dado que todos viajamos bastante actualmente—. Tengo muchas ganas de ir.”
Esta es la segunda vez que Jonathan González gana este prestigioso premio otorgado por sus compañeros; un hito más en una larga e ilustre carrera como uno de los surfistas más destacados de Europa. Según el propio surfista, “más de 10 años después de ganar el mismo evento en San Sebastián, esta segunda victoria en el Nixon Surf Challenge tiene un significado especial para mí, pero por razones muy diferentes”. La victoria no fue fácil: en un caluroso ambiente tropical, en unas aguas que suelen superar los 30 grados, Marlon Lipke (GER) y Gony Zubizarreta (ESP) ofrecieron lucha a lo largo de los 5 días de competición, demostrando en repetidas ocasiones por qué ellos también siguen ocupando puestos en el pináculo de la escena europea del surf.
Al final, el estilo limpio y elegante de Jonathan González les arrebató el espectáculo. Lanzando tails en todas direcciones, enlazando secciones con toda facilidad apesar de que las condiciones a menudo eran complicadas. González fue el recordatorio para los recién llegados de que al perro viejo aún le queda mucha vida. Ya a punto de volver a casa, el surfista canario añadió: “no podría estar más feliz en estos momentos. El tiempo no se detiene por nadie, es una sensación realmente buena saber que puedo batallar con estos chicos, y aún puedo defenderme”.
Un ejemplo de que el esfuerzo, constancia y pasión siempre llevan a una recompensa. Seguiremos atentos a las próximas batallas de este surfista canario, que esperamos que sea bastantes aún. Ahora toca esperar también a la próxima edición del Nixon Surf Challenge, un evento único, que reúne a los pros del surf para descubrir spots poco conocidos por todo el mundo y entre ellos elegir al mejor.