Otro artista enamorado de la luz de Cádiz. El gran Josele Santiago ofrece una sorpresa gaditana en su flamante disco. Ya somos "enemigos" íntimos, el impar rockero madrileño testimonia su amor por esta ciudad con unos versos a ritmo de swing, blues de la Bahía, y su voz de lija. No vamos a descubrir la pieza, eschúchenla, pero dejamos caer algunas claves pa regodearnos en el cariño mutuo, a falta de pan.
"Como tú me empapaste en Cádiz, nada me empapa ya". Toma ya.
"El mar se ha tragado Cádiz, ha inundado el hospital". Tsunami ya.
"Lloviendo soles en Cádiz y ortiguillas en el mar".
"Las mareas son el viento y la tormenta, Carnaval". Qué bonito, hijo.
Por no hablar de los "duendes verdes que no saben bucear", filigrana surrealista, al tres por cuatro de las "chirigotas bajo el mar", el entrañable "Vaporsito" y los aires nuevos en la ciudad de "estrechos y mil días largos".
El excelente disco de Josele Santiago no concede tregua desde los mismos inicios: "Puede que no sea volar / no tener apego al suelo / alto sólo es un lugar vulgar para el cielo".