Juegos de armas (War dogs, Todd Phillips, 2016. EEUU)

War dogs (Todd Phillips, 2016. EEUU): atrayente pero mediocre, o al menos discutible, intento de Todd Phillips (Viaje de pirados, Resacón en Las Vegas) de scorsesización,con esta historia de dos caraduras los cuales, la década pasada, se hicieron de oro con el tráfico de armas (ilegal, cómo no) en los conflictos en los que su país, Estados Unidos, se vio envuelto, esto es, Irak y Afganistán. Entre la comedia (sin gracia alguna) y el ya mencionado estilo de Martin Scorsese (la elección musical para tal efecto resulta simplemente horrenda, pero el ritmo también renquea), con estructura episódica (con esos rótulos en pantalla fundida a negro que vienen a ser frases archirepetidas dentro del género criminal) no encuentra el ángulo desde donde narrar la interesante historia. La salva- por decir algo- un, como de costumbre, impecable Jonah Hill. El otro, Miles Teller, es completamente inexpresivo, además de soso. Si se quiere insistir en el tema, existe la mucho más interesante El señor de la guerra (Lord of war, Andrew Niccol, 2005).