A Lizzo muchos la conocimos, me temo, cuando a raíz de la (reciente, aún) publicación de las innumerables listas con “lo mejor del año” por parte de los medios especializados, los más centrados en el ámbito anglosajón coincidieron en encumbrar “Boys” como una de las pistas más chiflantes de la temporada. Y canastos, tenían razón: en España tan sólo la prensa músical más atenta con la incontable producción de hip-hop estadounidense se había hecho eco de lo que estaba haciendo Melissa Jefferson, cuando lo cierto es que aunque la de Minessota le da efectivamente al rap, en sus canciones no es difícil rastrear una genealogía indudablemente pop, de popular.
El cso es que la segunda referencia -lo admito- que llega a mi de Lizzo no puede ser más chiflante: “Juice” directamente pasa de puntillas por rap, arrojándose de cabeza al disco-funk porque yo lo valgo, y se convierte en mi primera adicción de 2019. Encima viene acompañado de un vídeo con una estética irresistible ¡pero qué bien me cae esta chica! Let’s Get Physical, Lizzo!
Anuncios Publicado en: RevelacionesEtiquetado: 2019, Disco-Funk, Lizzo, Nice LifeEnlace permanenteDeja un comentario