Desde finales de junio hasta ahora he ido haciendo cosas diferentes. Unas en casa, otras en alguna salida, aquí en las cercanías de albacete o a Benidorm o Mojácar, en Almería. En cuaderno, como estas o acuarelas en formato mayor. Si estoy en casa a veces recurro a pastillas de tinta china y plumillas, si estoy fuera, estilográfica (Namiki Falcon flexible, en este caso). Luego en casa les doy sombras, diluyendo algo de tinta china, si no usé pincel de agua en su momento, si había tiempo y comodidad para hacerlo.
El anterior dibujo acuarelado, dibujado en los Pinares del Júcar, en las cercanías de Albacete, luego acuarelado en casa, que fuera hace mucho calor.
La siguiente es una acuarela sobre unos árboles otoñales, probando un nuevo líquido enmascarador, más fluido y manejable, de Liquitex. Unos días en Mojácar, en Almería, en la misma orilla de la playa, antes de que empiece a hacer calor en serio y de que todo se llene de gente, aunque en Almería no suele ocurrir. Dibujando desde la terraza del apartamento, a unos metros del mar. Con acuarela o con grafito, desde el mismo lugar, también en cuaderno. El cuaderno es de Hahnemülhe, formato cuadrado, 195x195 mm, papel de 140 gramos.
Unos bocetros en acuarela del movimiento de las olas, dibujados desde el mismo sitio que los anteriores. Papeles de acuarela distintos, satinados y de grado medio.Un dibujo de paisaje imaginario con grafito y algunos toques de acurela:
Una acuarela del entorno del Viso del Marqués.