Llegué a estar a medio metro del ave pero con el teleobjetivo de 300 mm y la vegetación intrincada se me dificultaba fotografiarlo, al menos le pude tomar algunas fotos. Intenté llamarlo con una grabación, pero tal como sucede con juveniles de la misma familia no responden al llamado.
Las imágenes las tomé durante el mes de febrero, en la zona de la Guardia del Juncal, partido de Cañuelas.



