Somos los nodos de la “K”: diferentes y conectados, pero con un color común: el de los principios que nos unen.
Como decimos en nuestros objetivos, estamos orientados a colaborar entre nosotros y generar un impacto positivo en lo local, pero también a ser una red productiva, poniendo lo mejor de nuestra red al servicio de proyectos de cambio y mejora organizacional.
Como aquí contamos, acabamos de construir un “barrio artesano”, pero ya hemos modelado nuestras primeras reflexiones para compartir contigo:
- Pablo Moratinos pone en valor la red como una forma más proactiva y consciente de comunicar y llegar:
Marketing compartido en red en el emprendizaje
- Irene Martínez comparte su experiencia sobre cuáles son las claves de que funcione el trabajo en red:
Trabajo en Red: Algunas claves para una colaboración libre y natural
- Ana Eguiazábal nos hace soñar con organizaciones cuyo foco esté puesto en las personas y donde se tomen “en serio el sentido del humor”:
El “Buen Sentido del Humor” en las organizaciones
Desde aquí te invito a que nos sigas en este camino que hemos emprendido.