Revista Arte
El newyorkino Karl Struss, no sólo ganó un Oscar a mejor fotografía por el trabajo en Sunrise de Murnau, sino que fue uno de los fotógrafos más importantes de la primera mitad del siglo XX; camarógrafo de Cecil B. DeMille, en sus inicios, también retrató a varias modelos y estuvo involucrado en la fotografía de moda, aunque siempre negó que hiciera ese tipo de trabajo, sin embargo, fue la ciudad y las transformaciones de éstas, las que mejor quedaron registradas tras su lente, como lo hizo en la ya citada Sunrise, en El Gran dictador de Chaplin, junto a Limelight, y otras películas de diversos géneros.