En esta tabla he comparado 20 variedades distintas de kétchup. Aparecen ordenadas por número de aditivos y, a igual cantidad, según la proporción de tomate declarada.
A diferencia de otras ocasiones, esta vez las marcas blancas no ocupan las primeras posiciones. Las más destacadas son Calvé, Heinz, Hellmann's y Kania (del Lidl). Me he llevado una gran sorpresa cuando he comprobado que la variedad clásica de Heinz es de las que menos cantidad de tomate tiene por cada 100 gr. de producto (de las que lo especifican en gramos, las que lo indican en porcentaje desconozco a cuántos gramos equivalen).
En el "lado oscuro" encontramos las marcas que utilizan el conservante E-211, benzoato de sodio, que ya lo encontramos en las tortillas y en las mermeladas y cuyo consumo, según algunos estudios, se asocia con el riesgo de padecer hiperactividad, cáncer, problemas alérgicos y respiratorios, entre otros. En el blog Explicando al explicador se detallan muy bien todas estas posibles consecuencias.
Ningún kétchup Heinz utiliza aditivos
Hay que tener cuidado con la marca Día porque cuenta con dos variedades distintas de kétchup. Una que incluye el rótulo de "sin conservantes" y, efectivamente, el único aditivo que contiene es el almidón. La otra no pone nada y presenta nada menos que 7 aditivos, incluyendo los omnipresentes carragenanos (E-407) que podrían estar relacionados incluso con algún tipo de cáncer, tal y como expliqué en esta entrada reciente. Además presenta un porcentaje muy bajo de tomate, justo en el límite legal para poder ser denominado kétchup. Por cierto, que en la tabla, he etiquetado como E-1404 la presencia de almidón, aunque en realidad no se sabe cuál es puesto que la legislación no obliga a especificarlo. Podría ser entre el E-1404 y el E-1450.El kétchup de Calvé, Hellmann's y Kania (Lidl)
tampoco contienen aditivos
En conclusión: Queda claro que para elaborar un buen kétchup no es necesario añadir ningún aditivo. Somos los consumidores quienes, optando por aquellos que no añaden estas sustancias, podemos forzar a los fabricantes a vender productos más naturales y con menos "complementos indeseables".