Si ya os conté en este post cómo el champú seco de Klorane es un básico en mi cuarto de baño desde hace muchísimos años, me encanta que Klorane haya solucionado el único “pero” que le ponía, que no era otro sino que dejaba el cabello demasiado blanco si no te centrabas a fondo en eliminarlo. Y es que en su último lanzamiento han incluido polvos de color beige natural para que el efecto sobre cabellos castaños u oscuros sea menos perceptible a la vista, pues ya no queda nada de rastro de polvo blanco en el cabello, ¡me encanta!
Por lo demás, nada ha cambiado, mantiene el mismo efecto perfecto para permitir espaciar los lavados del cabello o dar volumen a los cabellos más lacios, además de ser imprescindible para ese día en el que te es imposible lavarte el cabello (hospitales, vacaciones, cortes de agua en casa) y en esos momentos en los que te pilla el toro con la hora y no puedes salir de casa con el pelo sucio, un 10 a este producto que cuesta alrededor de 10 € en farmacia y que a mí me dura más de un año, lo utilizo muy pocas veces pero me parece genial cada vez que lo necesito y lo tengo a mano en casa. Uno de esos productos que os recomiendo sin duda alguna.