Tenemos que reconocer que el término “estrategia de contenidos” es un poco abstracto. Todos nos ponemos super serios cuando hablando de la importancia que tiene la estrategia de contenidos en la presencia de nuestra marca. Pero en realidad ¿Sabemos que es una estrategia de contenidos? Y voy un paso mas allá ¿Como nos aseguramos que esa estrategia de contenidos nos ayude a ganar dinero?
Empecemos por la definición. que Wikipedia se lo curra y acierta bastante, por lo que una estrategia de contenidos “consiste en crear y distribuir contenido relevante para clientes y potenciales clientes con el objetivo de atraerlos hacia la empresa y conectar con ellos”
Esta definición es extrapolable a cualquier sector, con lo que extraemos que todos y cada uno de nosotros, dentro de nuestro ámbito podemos generar contenidos interesantes. Bueno, aquí ya intervienen las formas, pero la esencia que es lo más importante, parte de nuestra experiencia y de nuestro sentido común.
Por lo tanto, si nos embarcamos en la aventura de generar contenidos ¿Como sabemos realmente si lo estamos haciendo bien? Pues básicamente, midiéndolo. Si algo nos permite internet y poder medir prácticamente todo.
- INFORMACIÓN DESDE EL ORIGEN
Esta información es interesante para conocer más, cuales son las fuentes que están enlazando su sitio web y las características de estas. La idea es generar un patrón entre el origen y sus páginas de destino. Es interesante estudiar este tipo de información ya que algunas páginas que nos referencia solo tiene valor por el seo, pero con otras podremos establecer una relación a largo plazo.
- MÉTRICAS DE NUESTRA WEB.
Es el contenido de consumo cuando el cliente está en nuestra casa. Aquí es donde se muestra si la empresa en cuestión tiene un compromiso por dar a sus clientes lo que necesitan. La idea es proporcionar un contenido estructurado y útil, dado que el cliente evoluciona y nosotros en todo momento debemos de cubrir sus necesidades. Aquí los reyes son las páginas por visita, el tiempo en el sitio y la tasa de rebote.
- INFORMACIÓN DE REDES SOCIALES.
Esta parte es fundamental para medir si los recursos destinados a la parte social superan a los ingresos que puedan estár generando. Debemos de saber atribuir el valor tanto a nuestra estrategia de branding como la de monetización de acciones. A través de la analítica debemos saber diferenciar cuales están siendo las acciones para cada uno de los canales, de forma que podamos adaptarnos tanto en presupuesto como en contenido a nuestra audiencia.
- CONVERSIÓN DE OBJETIVOS.
Este parte siempre ha sido el patito feo, no porque no sea viable sino que los contenidos no se han optimizado lo suficiente hacia la conversión. El objetivo es definir nuestra estrategia en conversiones directas e indirectas. Las directas son las traducidas en ventas, y las indirectas son las que introducen en un ciclo de compra en fases anteriores a la conversión final, pero que buscarán antes o después, la venta directa.
Una vez tengamos clara nuestra estrategia online, definiremos cual será el contenido y que función tendrá dentro de nuestro embudo de conversión. Así, apliquemos el sentido común y generemos ese interés en nuestro público objetivo, antes o después acabarán pasando por caja.