Esta va a ser la única herramienta que nos permita a cada uno salir del agujero en el que nos hemos metido y conseguir salir a flote. Dado que vivimos en una sociedad donde desde el alba al ocaso sufrimos un bombardeo continuado de información principalmente destinado a tener nuestros puntos de atención en cosas que aparentemente no parecen superfluas pero que en realidad lo son y mucho, cuyo principal objetivo es desviar la atención hacia cosas frívolas que evitan centrarse en lo que realmente importa, el ser humano y sus valores.
El objetivo de quienes dirigen el mundo en que vivimos está claro es el "no pensamiento", cuanto menos se piense menos se acciona y por tanto más fácilmente se puede manipular al individuo. La facilidad de la manipulación viene dada de la falta de conocimiento y del pensamiento que proporciona ese conocimiento sin el cual el hombre no hubiese llegado a día de hoy. Afortunadamente no se le hizo demasiado caso a la idea, tal vez intuída, que el cuerpo a través de sus movimientos, sus acciones, habla, piensa y recuerda, siendo capaz de desvincularse del volante de la mente y accionar por su propia cuenta. Son esos los momentos en los que las personas nos damos cuenta a posteriori que la acción fuera del pensamiento es la que nos evita tener miedo y por tanto accionar en pro de nuestra supervivencia. Este tipo de técnicas son muy utilizadas en el entrenamiento teatral, herramientas que el Arte proporciona al Coaching para conseguir que el individuo vence su miedo interno que es el que nos pone los límites y nos impide reaccionar.
Las herramientas de entrenamiento teatral permiten abrir el campo de la investigación corporal, no en vano no se encontrará por mucho que se busque una escuela de teatro donde el trabajo del cuerpo sea la columna vertebral del ciclo formativo. Tener un conocimiento minucioso del cuerpo es regla básica para cualquier actor, puesto que el juego de la escena es un puzzle donde todas las piezas deben encajar a la perfección y justo en el momento oportuno ni antes ni después. Esto no es posible sólo con un dominio absoluto del texto, es necesario que el actor haga uso de su maletín de herramientas al completo, esto incluye inexorablemente el cuerpo sin el que el texto hace poco o nada.
La acción o las acciones en el juego escénico son la materia prima, el dos más dos también del entrenamiento actoral o coaching que ejercitamos los artistas. El coaching con recursos de ocio proporciona al usuario un conocimiento completo de su propio ser más allá de reflexiones racionales, el actor trabaja desde la ejecución de acciones muy precisas y estudiadas para poco a poco dibujar lo que será el personaje. Es este entrenamiento de investigación sobre uno mismo lo que permite al artista erradicar de su trabajo diario el miedo y poder seguir rompiendo límites.