Los “gigantes” de internet, como Google o Facebook, están cada vez más interesados en el ámbito sanitario. Lo último que hemos conocido es que la red social Facebook podría dar el salto a un sector mucho más polémico: el de la información médica. Según Reuters, la red social está trabajando en varias ideas con un objetivo común: saber cuál es tu estado de salud.
No hay mucha información sobre los detalles del proyecto y se supone que en breve sabremos más. Hace poco publicamos sobre este tema, la “tecnologización” de la salud y de lo sanitario. Lo hacíamos al hilo de las lentes “inteligentes” para enfermos de diabetes made in Novartis y Google. El desembarco de las multinacionales de la tecnología en el ámbito de la salud no ha parado. La empresa farmacéutica Novartis y el gigante de internet Google están desarrollando unas lentes de contacto que denominan “inteligentes” porque miden el nivel de glucosa a través del fluido de las lágrimas. Los datos obtenidos en la medición son mandados vía inalámbrica a un dispositivo móvil.
No se sabe cómo les irá pues Google ya ha fracasado con su proyecto de Google Glass. Tal es la “obsesión” de las compañías “internátuicas” que Facebook ha adquirido no hace mucho Moves, una aplicación de fitness para iOS y Android que nos ayuda a mantener un seguimiento de la cantidad de ejercicio físico que hacemos durante el día en forma de pasos, rutas en bicicleta o sesiones de footing.
Google en los últimos tiempos está aliándose con las farmacéuticas. En septiembre de 2013, el famoso buscador anunció la creación de una pequeña compañía que operaría en el sector “de la salud y el bienestar”: Calico fue la marca escogida. Un año después, la firma ya ha llegado a acuerdos con dos de las mayores multinacionales farmacéuticas del sector, Novartis y Abbvie, y ha anunciado un proyecto para investigar en enfermedades como Alzheimer y Parkinson en el que se invertirán 1.500 millones de dólares (más de 1.100 millones de euros).
Quien lleva años como líder de las aplicaciones informáticas en sanidad es Apple. Usar los dispositivos Apple para recoger información sanitaria no es nada novedoso. Existen numerosos dispositivos en el mercado, muchos de ellos con la aprobación de la agencia estadounidense de medicamentos, la FDA, capaces de medir desde los niveles de glucosa en sangre hasta la presión arterial. El propio procesador M7 en los nuevos iPhone es capaz de actuar como podómetro, procesando información sobre calorías gastadas y nivel de actividad. Sin embargo, a día de hoy la información recogida por cada uno de estos dispositivos se quedaba en el compartimento estanco de su aplicación, sin integrarse con otros datos.
Ahora nos encontramos frente al primer intento serio de aglutinar e interrelacionar toda esta información médica. Apple vende ya una base de datos a la que tendrá acceso el propio usuario y, si los planes de Apple dan sus frutos, los profesionales sanitarios.Como siempre hay dos aspectos antitéticos a tener en cuenta. Disponer de toda nuestra información médica de manera rápida y cómoda ofrece ventajas pero también pueden haber usos fraudulentos, filtraciones o tráfico con esa información que nos deje desprotegidos. Mucho me temo que esto no esté aún regulado.