Revista Libros

La amaba - Anna Gavalda

Publicado el 24 diciembre 2010 por Rusta @RustaDevoradora
La amaba - Anna GavaldaEditorial: Booket
Páginas: 192
ISBN: 9788432217098
Precio: 6,95€

La amaba: Dos personajes en una situación muy original

La amaba nos cuenta la historia de Pierre y Chloé, que son respectivamente suegro y nuera. Pierre es un hombre casado de sesenta y cinco años frío, distante, autoritario e incapaz de mostrar sus sentimientos hacia los demás, por lo que no despierta muchas simpatías en su entorno. Chloé, por su parte, acaba de separarse de su marido, el hijo de Pierre, que la ha dejado por otra mujer más joven, y tiene que enfrentarse de nuevo a la vida junto a sus dos hijas. Los dos, junto a las niñas, pasan un fin de semana en una casa alejados del mundo, en la que tendrán tiempo para hablar, recordar y sincerarse.

Me parece una situación muy curiosa e original: el suegro y la nuera juntos, protagonistas de una novela, dialogando entre ellos como pocas veces ocurre en otros libros. Normalmente, la relación entre este tipo de personajes suele ser muy fría y no va más allá de las reuniones familiares en las que el o la protagonista tiene que lidiar con las manías de los padres de su pareja. Es cierto que la parte más destacable de la historia (el momento en que Pierre se sincera y explica su historia) también sería creíble entre un padre y una hija, una situación más corriente, pero las escenas en las que tocan el tema de la separación de Chloé sí que es interesante que el otro personaje esté ligado con su ex marido. La interacción entre dos personajes que en un principio no tienen mucho en común se plasma a la perfección en el texto y le hace ganar puntos a la novela para alejarse de cualquier encasillamiento literario.

Mis impresiones: Calidez y sentimiento

La amaba no es un libro que destaque por su acción, sino que lo hace por el desarrollo de los personajes y todo lo que transmite la novela en general. Al principio, entre Pierre y Chloé apenas hay relación. De hecho, ella no siente mucha simpatía hacia él porque piensa que es una persona egocéntrica e incapaz de preocuparse por los demás (es la imagen que dan muy a menudo las personas frías y tímidas). Sin embargo, a medida que van hablando, Pierre le descubre una parte de sí mismo, de su vida, que siempre había ocultado a los demás, y se pueden establecer algunos puntos de conexión entre la historia de Pierre y la de Chloé y su marido. Ella, a su vez, evoluciona en el sentido de que cambia de manera de pensar respecto a su suegro. Después de lo que le cuenta en aquella casa ya no lo puede ver igual que antes.

La novela tiene un aura muy especial. Dos personas reunidas en una casa de campo, junto a la chimenea, charlando y recordando juntos. Está situación, tal y como está recreada en el libro, me transmite mucha calidez. Mientras leía tenía la sensación de que yo también estaba leyendo junto a la chimenea tapándome con una manta. Es un ambiente muy cautivador e íntimo. Es un espacio pequeño y aislado, que puede parecer lo más fácil de escribir a la hora de redactar una novela, pero que aquí transmite muchísimo encanto y tiene esa aura tan especial que sólo pueden tener los lugares íntimos y antiguos que no estamos acostumbrados a visitar. Pierre y Chloé hablan de sentimientos, pero aun así hay un sentimiento flotando en el ambiente, el que te transmite ese lugar tan particular en el que se encuentran. Me recuerda un poco a Seda, de Alessandro Baricco, otro libro cortito con lenguaje sencillo pero lleno de sentimiento y con un aura muy especial que embelesa, aunque en este último caso la ambientación y la historia que narra son totalmente distintas.

El diálogo contiene varios elementos que hacen pensar. En primer lugar, el tema de las apariencias engañosas. Pierre parece un hombre frío al que sólo le importa él mismo, y sin embargo Chloé descubre que no es así. El diálogo provoca un momento de sinceridad en el que Pierre necesita sacarse ese peso de dentro y contarlo todo, aunque sea a una persona que en teoría no es su pariente más cercana. Las personas que guardan un secreto importante pueden llegar a hacer una vida normal como si aquello no hubiera ocurrido nunca, pero la pregunta interior de "¿qué hubiera pasado si…?" siempre permanece allí, junto a las ganas de explicárselo a alguien y el miedo por lo que puedan pensar de él si al final se decide a contarlo. Pierre explota, le muestra su debilidad y sus sentimientos a Chloé, y ese momento inolvidable merece sin duda ser leído.

Otro tema que me ha gustado es la manera en que se vive una ruptura y cómo puede una persona que acaba de ser traicionada seguir adelante y cuidar de sus hijas sin hundirse. Chloé es fuerte y procura ocultar sus sentimientos cuando está con las niñas, pero a su suegro no se le escapa su mirada triste y sus lágrimas cuando la ve sentada a lo lejos. Creo que Chloé es un personaje que se trata con mucho realismo: no es una heroína que en dos días lo ha superado todo; tampoco tiene una personalidad excesivamente depresiva que le impediría levantarse de la cama; y por supuesto no es de las que lo arregla todo conociendo a un nuevo hombre. Me parece que su reacción es muy creíble y está bien plasmada.

El trato que le da Pierre en esas circunstancias me gusta, aunque no precisamente porque muestre un carácter compasivo con su nuera. Normalmente, cuando alguien con quien no tenemos mucha confianza nos intenta apoyar por algún motivo, nos dice lo que queremos escuchar y no es siempre sincero. Aquí, en cambio, Pierre no duda en defender alguna actitud concreta de su hijo. No defiende lo que le ha hecho a Chloé, en absoluto, pero también siente pena por él por otras cosas y se lo dice a su nuera con toda la naturalidad del mundo. A su vez, Chloé tampoco se corta en decirle a Pierre lo que piensa de él. No penséis que caen en el insulto barato y se pasan el día discutiendo, porque para nada es así (el estilo de Gavalda es muy elegante como como para caer en eso), pero el momento que viven ambos y el lugar en el que se encuentran les proporciona una intimidad que hace que no quieran guardar todas las formas y aprovechen para decir lo que piensan sin preocuparse por lo que el otro pueda pensar.

De todas formas, el tema por excelencia de esta novela es el amor: un amor que llega y te enciende como una llama, amor a primera vista, el más puro y el que siempre se nos presenta como el mejor en libros y películas. Ese amor imposible, que lleva a engaños y traiciones, que tiene que ocultarse a los demás pero que aun así hace que los que lo disfrutan pasen por los mejores momentos de sus vidas. En sintonía con lo que os comentaba antes del ambiente y la calidez que tiene esta novela, durante toda la lectura me imaginaba la escena del relato de Pierre con una balada de amor francesa sonando de fondo. En esto sí que he notado una gran diferencia respecto a la otra novela de la autora. En Juntos, nada más también aparecía el amor, pero la amistad entre personajes diferentes era el tema principal. No penséis que se trata de una novela romántica: el amor aparece como sentimiento, no como una historia cualquiera de chico y chica que se enamoran.

Para terminar, quiero añadir que la novela es muy cortita y al tener tanto diálogo se lee en dos sentadas. A pesar de su corta extensión, no me parece el libro más adecuado para leer en el bus, porque como os decía vale la pena saborear cada una de sus líneas y disfrutar del encanto que desprenden. Sí que me parece un libro muy adecuado para leer en una tarde o noche de invierno, en un momento de relax en el que apetezca desconectar de todo. Así que si queréis un buen entretenimiento para los días fríos que se acercan, ya sabéis.
Mi valoración: 7,5/10

Volver a la Portada de Logo Paperblog