La Atlántida

El continente perdido de Platón

Erupción volcánica en la isla de Santorini, en 1740 a. de C. "Tras un violento terremoto y un diluvio extraordinario, en un día y una noche terribles, la clase guerrera vuestra se hundió toda a la vez EN la tierra, y la isla de la Atlántida desapareció de la misma manera, hundiéndose en el mar."

Platón, "Diálogos". 

Platón fue el primero que habló de la existencia de la Atlántida. Lo hizo en dos de sus Diálogos ¿Timeo y Critias¿, escritos hacia el 350 a. de C. En ellos cita como fuente al sabio Solón, quien a su vez había escuchado el relato 200 años antes en Egipto. Platón relata la historia de una floreciente civilización que vivía en una isla más allá de las Columnas de Hércules. Que dicha civilización, cegada por su poder, se atrevió a desafiar a los dioses, y que estos, encolerizados, la destruyeron en un día y una noche. La fecha de la destrucción de la Atlántida se habría producido 9.500 años antes de que el filósofo griego escribiera la historia.

Ya durante la Antigüedad, los propios contemporáneos del autor mostraron sus dudas al respecto. Aristóteles, en el siglo IV a. de C., no tuvo problema en afirmar que aquello había sido un invento de su maestro. Otros escritores como Plinio el Viejo, Plutarco o Estrabón tampoco se atrevieron a apoyar su existencia histórica. Pero fue durante el siglo XIX cuando la leyenda cobró un auge inesperado.
Desde entonces ha habido opiniones para todos los gustos. Desde aquellos que consideran la existencia de la Atlántida como un mito inventado por Platón con el objetivo de explicar su idea de la república ideal, hasta aquellos otros que se atreven a buscar respuestas más allá de la ciencia.
Sea como fuere, lo cierto es que el mito de la civilización perdida en medio del océano ha servido de inspiración a decenas de científicos y escritores. Jacques Cousteau la identificaba con Thera, una isla griega situada a 110 kilómetros de Creta. Se trata de Santorini, que es circular, tal y como la describe Platón, su civilización estaba muy avanzada y, al igual que los atlantes, practicaba el culto al toro. En el año 1470 a. de C., su volcán entró en erupción y provocó un gran maremoto y la desaparición de la civilización minoica.

Más allá de Gibraltar

El problema que presenta el continente mítico es su ubicación geográfica. Platón afirma que estaba más allá de las Columnas de Hércules, es decir, más allá del actual Gibraltar. Mientras unos autores la identifican con las Azores, otros la sitúan en las proximidades de las islas Bimini, en el archipiélago de Las Bahamas; y otros van incluso más allá al apuntar a América como la patria de los atlantes.
Hoy el mito sigue más vivo que nunca, y el investigador americano Robert Sarmast, en colaboración con la compañía chipriota EDT y la americana Phoenix, lanzó recientemente una nueva expedición con el objeto de conseguir imágenes de la Atlántida. El lugar al que se dirigieron es un misterio; está situado en el mar, a unas cinco horas al norte del puerto chipriota de Limassol. Al mismo tiempo, otra expedición llamada Deep Med One, dirigida por el profesor francés Jacques Collina-Girard, se dispone a investigar los restos de una pequeña isla sumergida hace 11.000 años. Como señalaba Platón, se encuentra a 200 metros de profundidad en las proximidades del estrecho de Gibraltar.