«La belleza debe morir», de Mercedes Corbillón

«“Nosotros” es una palabra sin futuro, y las palabras sin futuro tienden a desmoronarse en el presente. Mejor evitarlas.»

Reseña escrita por Maudy Ventosa.

La pontevedresa Mercedes Corbillón, que se mueve entre libros y ama los viajes, ha publicado una novela en La Editorial Espasa Calpe: La belleza debe morir. Una obra que no debieran leer los que acaban de finalizar una relación, los que no ven futuro en la suya o los maduros, que no saben si empezarla. ¿O sí? Está escrita desde las tripas, porque un corazón no puede soportar tanto dolor ni tanta nostalgia. Con capítulos cortos y frases contundentes, que tienes que subrayar a cada momento; va desgranando a modo de larga carta las contradicciones que toda relación conlleva, desnudando su alma y sobrecogiendo la nuestra. Quiere recordar para luego olvidar como una paradoja, y la misiva va estallando de puro lirismo.

La protagonista es la propia narradora y los personajes aparecen como en elipsis, porque todo lo llena él, la lluvia y su ausencia. Existes porque yo te soñé…. El amor es imposible de contar. El desamor es tan cruel que cura las heridas y borra los recuerdos. Tan cruel como el tiempo que va desvaneciendo las sensaciones que quedan en la piel de las caricias; que reseca los labios cuando se agotan los besos; que humedece los ojos, aunque los deje sin brillo.

Se dejaron varias veces y ahora, en la bella Venecia, cuando ya no está con él, cuando ya no están juntos es más que nunca, cuando lo siente más cerca. La mira desde cada calle estrecha, desde cada puente, desde cada canal, desde los picos de las iglesias. El dejarse varias veces ¿significa que la definitiva debiera ser más fácil, menos dolorosa? No, porque él le hacía sentir viva; con él tenía una vida que ya no existe. Se ha quedado sin su aliento, le falta su voz, sus besos, sus historias, sus silencios, su ausencia, cuando era reversible.

La escritora conoce muy bien Venecia, cruza el ponte degli Scalzi, Santa Croce y el Dorsoduro, el Gran Canal, el Cannareggio; se ha empapado de sus historias, de sus rincones y de los personajes que la visitaron. Va de la mano de los amantes George Sand y Alfred de Musset, Proust, Henry James, Constance Feminore Woolson…

La protagonista es una mujer divorciada, con una hija que prefirió irse a vivir con un padre que disfrutaba en el parque y que ella vivía como una condena, porque nunca supo jugar con una niña; vive su sexualidad sin tapujos, libremente, porque cuando muere el amor solo queda la carne y el sexo sin amor se acaba cuando se acaban las palabras. Por eso prepara su casa siempre siguiendo el mismo ritual cuando invita a sus amantes

Éramos demasiado mayores para enamorarnos y lo bastante mayores para saber que el amor no es capaz de transformar nada. Es más, enquista las posiciones. Como era previsible desde el momento que lo conoció, sabía que era casado, que mantenía un cómodo equilibrio con su mujer, y que ésta supo de su existencia desde la primera vez que se vieron, pero ella era mujer de presente, no querían ofrecerse un futuro. Yo quería tu presente sin darte avales de futuro. Tú querías mi futuro sin darme avales de presente.

Acompaña en su viaje a la protagonista su madre, esa persona que creía vulnerable y en la que nunca quiso convertirse porque quiere tomar sopa todos los días y habla con cualquiera…Ahora está descubriendo que estaba equivocada creyendo que la dulzura era sumisión, la ternura debilidad, y la bondad vulnerabilidad. Al contrario que su madre, ella no sabe soñar. Solo amar. Tendrá que seguir adelante sin él. Jugó y perdió y durante su relación siempre tuvo miedo: a quererle, a perderle, a que no la quisiera, a no volver a besarle… pero se atrevió y se destrozó con él.

Venecia en invierno, con nieve y acqua alta; comiendo en una trattoria en la calle de los traperos pasta allevongole o tramezzinos y bebiendo lambrusco.

Amo el invierno en Venecia, cuando su decadencia es obvia. Tal vez la amo solo porque se acaba. Tal vez te amo a ti porque sabía que te desvanecerías y que lo único que me quedaría es el recuerdo de tu belleza. Algún día dejará de doler y podré incluso disfrutar de la nostalgia. Por ahora todo es asfixia.

PERSONAJES:

• Ella, tiene cincuenta años y una niña. Estuvo casada. Ahogaba el duelo con hombres guapos. Les advertía: tengo muchos amantes y el amor ya lo viví. No se tocaban hasta los postres. Dispuesta para el placer y para la charla. Ejercía un rol masculino por el hecho de tener sexo cuando la viniera en gana, por la actitud de conquista y por esa forma de vivir los romances bien surtidos de fuegos artificiales que no arden jamás.
• Él era un hombre guapo y no pasabas desapercibido. Elegante, de frente amplia y los ojos oscuros como pozos de petróleo. Decía: “cuando aceptes que esto no tiene futuro, desaparecerás”.
• La madre, que cada día quiere tomar una sopa. Lleva siempre la sorpresa en los ojos.
• Su hija Leo, con la que nunca supo jugar.
• Alessandro, que sabe contar historias.
• Y Venecia, que no es una ciudad que pisas, es una ciudad que vives. Si no es así, no te la mereces y deberías irte a otra parte.

Lee y disfruta de un fragmento de la novela.

La autora:
Mercedes Corbillón (Pontevedra) es una de las fundadoras de la librería Cronopios con sedes en su ciudad natal y en Santiago. Desde este espacio ha ido construyendo una vida en torno a la literatura y, hoy en día, es una voz respetada y frecuente en medios de comunicación y eventos literarios. Escribe semanalmente en los periódicos La Voz de Galicia, Diario de Pontevedra y El Progreso de Lugo, y también colabora en revistas como Tempos Novos. Es jurado de numerosos premios de novela como el Xerais, el Torrente Ballester o el Alfaguara, entre otros. Colabora en el programa Un alto en el camino de Onda Cero, conducido por Susana Pedreira, donde habla de viajes y libros, sus grandes pasiones. Es autora de los textos del álbum Verano en A Toxa, ilustrado por Maru Godàs, y publicado en 2022.

El libro:
La belleza debe morir ha sido publicado por la Editorial Espasa en su Colección Espasa Narrativa. Encuadernado en rústica con solapas, tiene 256 páginas.

Como complemento pongo un vídeo con una entrevista a Mercedes Corbillón realizada por Saúl Cruz para Atlántico Televisión.

Para saber más:
https://www.facebook.com/mercedes.corbillon/?locale=es_ES
https://www.instagram.com/senhoradeprovincias/?hl=es