Revista Moda
Si de una boda se está hablando estos últimos días es de la de Marta Ortega (heredera del imperio Inditex) y el jinete Sergio Álvarez. Pues bien, no os puedo mostrar muchas imágenes del enlace pero si comentaros algunos de los detalles que se han desvelado, hasta el momento, del evento.
El primer misterio ya desvelado, es como en todas las bodas, el vestido de la novia. Mucho se rumoreó sobre si luciría un diseño low-cost diseñado por el equipo de Zara. Pues bien, finalmente el lujo se impuso y la gallega se decantó por un vestido diseñado exclusivamente para ella por el conocido modisto americano Narciso Rodriguez.
El diseño partió de una idea que tenía la novia y que el diseñador, junto con las aportaciones de esta fue confeccionando. Se trata de un sencillo vestido de seda con corte al biés, escote de pico y pequeños bordados. Como no ha trascendido a los medios ninguna imagen del vestido completo os adjunto el boceto del vestido y la única foto de Marta Ortega y su padre el multimillonario Amancio Ortega.
La novia llevaba un sencillo recogido en la nuca donde prendió un velo de tul de seda. El ramo fue confeccionado por el prestigioso Thierry Boutemi. El maquillaje muy natural siguió la linea de todo el estilismo. Como joyas unos pequeños pendientes. Para mi gusto y con toda sinceridad, de lo poco que veo en las imágenes, creo que la chica será heredera de un gran imperio pero que no ha acertado en nada con su estilismo nupcial. La verdad es que nunca he visto buenos looks de esta chica y, en sus caso, esto es de juzgado de guardia. Pero bueno, ya se sabe, ¡en casa de herrero, cuchara de palo!
El novio, el jinete Sergio Álvarez escogió (o le encogieron) un elegante traje negro de Massimo Dutti. Al igual que ya hizo en la fiesta pre-boda que se celebró el día anterior en el hotel Hesperia Finisterre de A Coruña. Allí celebraron para sus casi 200 invitados una cena informal de inspiración oriental donde se sirvió aperitivos de sushi elaborados por el chef Kasuhoshi Komuta del restaurante barcelonés Shibui junto con productos típicos gallegos elaborados por Marcelo Tejedor, chef del hotel.
Para la cena pre-boda Marta lució un vestido largo rojo con chaqueta de zorro y cartera de mano y sandalias dorados. El futuro marido vistió traje negro con zapatos y corbatas también del mismo color. Los novios agradecieron el interés y felicitaciones de los vecinos y gallegos que se acercaron a los exteriores del hotel pero no quisieron hacer declaraciones ni "soltar" palabra sobre los secretos de la boda.
Según cuentan los medios, la boda que se celebró en el Pazo do Drozo en Cambre reunió a invitados como Ainhoa Arteta y su marido y Atina Onhasis entre otros. Dicen que se creó una pequeña capilla con capacidad para 12 personas con decoración austera. El resto de los invitados siguieron la ceremonia a través de pantallas. Para la decoración de la carpa los organizadores se inspiraron en los clubs de hípica ingleses y se utilizaron vajillas y cuberterías de Zara Home. Así que entre tanto lujo se respiraría un poco de esencia Low Cost....
Mil Besos y Mille PapillonsJud