Título: La bruja y el perro.
Autor: Marina Tena Tena.
Páginas: 11.
Género: Relato, fantasía.
¡Hola viajeros del tiempo!
Hoy os traigo la reseña de la segunda de mis lecturas que he hecho este marzo para la iniciativa #EnMarzoLeeGratis 2019.
En esta ocasión se trata de un relato muy cortito que pude disfrutar mientras esperaba una gestión y aprovechar mejor el tiempo.
Paso directamente a la reseña porque poco más hay que decir que no haya dicho ya.
Sipnosis:
Zoe no sabe si le gusta el desierto o simplemente pertenece a la arena y las rocas como pertenece a su padre. Pero lo conoce y sabe moverse. Sabe cuándo avanzar y cuándo refugiarse. Sabe entender los dialectos y sabe buscar brujas. Por eso está viva y la llevan con ellos, aunque ella también lo sea.
A medias. Porque no es nada del todo. No es bruja ni humana. No es hija ni esclava. No es mujer ni perro. No del todo. Nunca del todo.
Pero es Zoe.
Y eso le basta.
Tal como os decía en la entrada en la que os hablaba de la iniciativa y de algunos títulos que me habían llamado la atención me decidí por seleccionar La bruja y el perro más que por su sipnosis, por las buenas críticas que tiene tanto en goodreads como en lektu (links como siempre pinchando en los vasitos al final de la entrada).
La verdad es que no sabía lo que me iba a encontrar, tal vez algo de fantasía medieval o fantasía oriental ya que menciona a las brujas y al desierto, pero no es el caso. En La bruja y el perro nos encontramos en una especie de futuro cercano distópico - tal vez no para todos, pero para las brujas; seguro- en el que como ya habréis adivinado la magia ha vuelto. En el relato seguimos a Zoe, experta en el arte de sobrevivir, tanto al desierto como por ser una bruja. Una bruja que busca a otras brujas junto con otros cazadores.
En este relato no sé si me ha gustado más la ambientación o lo bien construído que está el personaje de Zoe. La verdad que como relato corto es insuperable, mantiene muy bien la tensión y perfila muy bien a los personajes y el conflicto; pero sin duda me ha dejado con ganas de saber más. De saber más del mundo, de la vida en el desierto, de la huída de las brujas, de la sociedad de las ciudades, de la infancia de Zoe y de la vida del resto de secundarios. Porque por muy intensa que sea la historia y ese final cerrado, como digo por muy bien que funcione como relato corto lo cierto es que esas pequeñas pinceladas que ha dibujado Marina en el relato hacen que veas parte del mundo que hay detrás y que quieras seguirlo explorando.
Me encantaría que hubiese un montón de relatos acerca de la vida de otros moradores de ese mundo y así seguir disfrutando de él. La historia de una ruja que huye al desierto, la historia de unos padres que se quedan en la ciudad, poder ver cómo se produjo el cambio y lo que supuso…
Pero soñar es gratis aunque no sirva para mucho.
Así que lo tengo muy claro al recomendaros leer este relato. Sobre todo si pensáis que no hay talento entre las escritoras o en la gente que no publica con una editorial, porque este relato os va a dar un toque de atención por partida doble.