Título: La casa de los espíritus
Autora: Isabel Allende, la escritora chilena más internacional, dramaturga y la autora en lengua castellana más leída del mundo (descontando a la fallecida Corín Tellado). Prima segunda del presidente Salvador Allende, se exilió de Chile tras el golpe militar de 1973, y en 2003 se naturalizó estadounidense. Ostenta una larga lista de galardones, que incluyen el Premio Nacional de Literatura y el Hans Christian Andersen. Recibió y recibe duras críticas negativas de expertos literarios y colegas de profesión, en especial de su paisano Roberto Bolaño. Pero goza del favor del público, con casi 60 millones de ejemplares vendidos y traducidos a 35 idiomas (Get over it).
A qué género(s) y estilo(s) pertenece: De pleno derecho, al realismo mágico, por su forma de engarzar hechos fantásticos en un entorno cotidiano. Es un drama por los sucesos que narra y por el tono en que lo hace, que sin embargo provoca sonrisas y hasta carcajadas en algunos momentos, por lo que podríamos calificarlo de tragicomedia. Por supuesto, es una novela romántica, y es también una novela histórica, por relatar la historia moderna de Chile.
Qué cuenta: La historia de Chile desde principios del siglo XX hasta el golpe de estado de Augusto Pinochet (que arda en el infierno), a través de la intrahistoria de una familia, los Trueba, tanto de su patriarca, Esteban Trueba, como de cuatro generaciones de mujeres. Mediante las cuitas cotidianas de los Trueba, sus pasiones y sus devenires, asistimos también a la profunda transformación social de Chile, y a los cambios que el país y sus gentes experimentaron.
Mágico. Es la palabra que escogería si hubiese que definir "La casa de los espíritus" con solo una. Heredera directa de Gabriel García Márquez, Allende tiene una capacidad innegable y sobresaliente para ese género tan iberoamericano que es el realismo mágico. Las depositarias de esta magia son, en gran medida como veremos, las mujeres que componen la saga familiar de los Trueba, cuyas vivencias se ven marcadas por sucesos fantásticos, esotéricos, extraordinarios y hasta rocambolescos.
Intentaré resumir la historia. Severo del Valle (ateo y masón) y su esposa Nívea (agnóstica y sufragista) tienen quince hijos, de los que nos interesarán Marcos, Rosa y Clara. Rosa tiene los cabellos verdes y es de una hermosura incomparable, ni un defecto ni una mácula enturbian su belleza, pura y beatífica. Teje el mantel más grande del mundo, en el que borda un animalario fantástico de seres inexistentes. Clara, llamada Clara clarividente por sus capacidades premonitorias, vive en las nubes, despreocupada de los asuntos mundanos, se comunica con los espíritus, mueve objetos con la mente y escribe un sinfín de "cuadernos de la vida" que serán la base de la narración. Marcos es un viajero incansable que regresa de sus viajes cargado con infinidad de objetos, libros y especies exóticas. Es quien trae a Barrabás, el perro que inaugura el relato, que crece hasta el tamaño de un potro y tiene un apetito insaciable, marcando el tono de realismo mágico que tendrá el libro.
Esteban Trueba es hijo de Ester Trueba y tiene una hermana, Férula. Su padre dilapidó la fortuna familiar, y Esteban comienza la historia en la pobreza. Se promete con Rosa pero, cuando ésta fallece, desposa a su hermana Clara. Esteban prospera en los negocios, explotando la finca agrícola "Las tres Marías" primero y todo tipo de negocios después, entrando en política y convirtiéndose en senador conservador de manera vitalicia.
Esteban y Clara tendrán tres hijos: Blanca y los gemelos Jaime y Nicolás, que pese a ser mellizos son totalmente distintos, tanto de físico como de carácter. Blanca tendrá a su vez una hija extramatrimonial llamada Alba, que tiene los cabellos verdes de su tía Rosa, y que es quien escribe la historia a partir de los "cuadernos de vida" de su abuela Clara.
Otros personajes de interés serán Pedro Tercero García, el enamorado de Blanca, padre de su hija Alba, cantante popular y rival político de Esteban Trueba; Esteban García, nieto no reconocido de Esteban Trueba; Amanda, pareja de Nicolás y amor platónico de Jaime, y su hermano pequeño Miguel, que con el tiempo será activista político, guerrillero y el amor incondicional de Alba.
Gracias, Wikipedia, por ahorrarme trabajo [fuente]
La línea genealógica Nívea - Clara - Blanca - Alba comparte, como vemos, nombres relacionados con la albura, la luminosidad y el color blanco. Más aún, para nombrar a Alba recurren a un diccionario de sinónimos, y expresan su miedo a agotar las palabras de la lengua castellana para el tema. Todas comparten además talentos y características pintorescas y poco comunes, como los cabellos verdes de Rosa y Alba, la clarividencia de Clara o la belleza y presencia de ánimo de Blanca.
Sin intentar resumir más, pues me resulta imposible sin extenderme demasiado, "La casa de los espíritus" va relatándonos la historia moderna de Chile a través de la familia Trueba, y así asistimos a la transformación del país y de su sociedad, de sus usos y costumbres, de sus gentes, de la vida en la ciudad y en el campo, de las injusticias, de la política y sus corruptelas; de sus esperanzas y anhelos, que culminan con el triunfo electoral de Salvador Allende y mueren con el golpe de estado que supuso su deposición y su supuesto suicidio, naciendo la dictadura militar y una represión de las libertades tan cruel, terrible y ensañada que estremeció y escandalizó al mundo entero.
Dos son, pues, los motores que mueven la trama de "La casa de los espíritus". Uno, la fantasía. Otro, las pasiones: el amor, el odio, la ambición... Los personajes, acusados en algunas críticas de planos, vacíos, estereotipados y sin sentido, para mí están vivos y rezuman pasiones, pulsiones de emoción que les dan entidad, parecen tomar volumen y salirse de las páginas. Además, sus emociones encarnan a los diversos tipos chilenos. Esteban Trueba es el terrateniente, el hombre rico (su fortuna parece inagotable) que no admite réplicas ni disensiones a su autoridad, que sólo contempla su manera de hacer las cosas. Puede ser cruel en extremo, como es con los campesinos de "Las tres Marías" y a la vez cariñoso y tierno con su nieta Alba. Nervioso, irascible, colérico, enérgico, es puro genio, hasta brutal. Caracterizado por Allende con rasgos excesivos, exagerados, hiperbólicos incluso, obsesionado hasta la paranoia con el marxismo, entronca con los esperpentos del genial Valle-Inclán.
"Tuvo la habilidad de ser el primero que llamó a la izquierda «enemiga de la democracia», sin sospechar que años después ése sería el lema de la dictadura."
Mucha gente entiende que Allende mantiene una postura machista por la violencia contra la mujer que existe a lo largo del libro, sobre todo por parte de Esteban Trueba, que golpea a su mujer Clara, rompiéndole varios dientes (que ella conserva en una bolsa de fieltro que siempre lleva colgada al cuello) y tiene la costumbre de "tumbar" campesinas, esto es tomarlas por la fuerza y violarlas, procreando un sinnúmero de hijos ilegítimos, de uno de los cuales nacerá Esteban García, quien tendrá un papel crucial en la novela.
Jeremy Irons es Esteban Trueba en la película de la que hablaremos después [fuente]
Pero, a mi juicio, Isabel Allende solo refleja una realidad, algo que era común en una época, y que sigue ocurriendo. Al contrario, la figura de la mujer es capital en la novela, y "La casa de los espíritus" es una homenaje a las mujer chilena. El ejemplo más claro lo vemos cuando Alba es liberada de su reclusión en las cárceles políticas de Pinochet, y es auxiliada por una humilde mujer del pueblo, que sin conocerla ni pedirle nada a cambio, la acoge, la oculta y la cuida :
"Era una de esas mujeres estoicas y prácticas de nuestro país, que con cada hombre que pasa por sus vidas tienen un hijo y además recogen en su hogar a los niños que otros abandonan, a los parientes más pobres y a cualquiera que necesite una madre una hermana, una tía, mujeres que son el pilar central de muchas vidas ajenas, que crían hijos para que se vayan también y que ven partir a sus hombres sin un reproche, porque tienen otras urgencias mayores de las cuales ocuparse. Me pareció igual a tantas otras que conocí en los comedores populares, en el hospital de mi tío Jaime, en la Vicaría donde iban a indagar por sus desaparecidos, en la morgue, donde iban a buscar a sus muertos. Le dije que había corrido mucho riesgo al ayudarme y ella sonrió. Entonces supe que el coronel García y otros como él tienen sus días contados, porque no han podido destruir el espíritu de esas mujeres."
Anchoniou es Pedro Tercero García [fuente]
El resto de personajes encarnan a su vez a otros tipos: Pedro Tercero García es un hijo del pueblo, y su carrera como cantante popular, agitador político y posteriormente ministro con Salvador Allende nos recuerda a figuras como la del malogrado cantante Víctor Jara. Esteban García es el militarote de extracción popular, no de carrera (lo que en España llamamos "chusqueros") crecido en el resentimiento hacia las clases dirigentes, que una vez amparado por la más absoluta de las impunidades, se entrega al revanchismo y al ajuste de cuentas.
Podría hablar largamente de los personajes: Jaime, con su ternura y su infinita bonhomía; Nicolás y sus excentricidades; Amanda perdida por las drogas y la vida bohemia; Férula Trueba y su espíritu orgulloso y sufridor, Tránsito Soto, la noble prostituta que jamás olvida el favor que le debe a Esteban Trueba; Miguel, el idealista irredento; o secundarios entrañables como el Poeta, que no es otro que el titánico Pablo Neruda, y el Candidato, nombre que recibe Salvador Allende en esta novela. Pero aún no he hablado de lo literario.
"La casa de los espíritus" alterna la narración en tercera persona con fragmentos en primera persona, en los que Esteban Trueba toma la palabra. Es Alba quien relata la historia, aunque se refiere a sí misma como un personaje más, pues en realidad está poniendo en orden y dándole forma, como ya comenté, a los "cuadernos de vida" de su abuela Clara. No es hasta el final que habla en primera persona, cuando ya Esteban ha fallecido. Su omnisciencia es total, y con frecuencia anticipa hechos que desarrollará más tarde y adelanta la importancia que tal o cual personaje tendrá para la historia.
Su estilo narrativo me resultó cautivador. El ritmo refleja el pulso narrativo de autores como García Márquez y no puede sustraerse a la influencia de éste. Incluye largas descripciones, y su lenguaje resulta dulce, melodioso, y muy sensual, pues transmite colores, olores y sabores, describe tanto con los adjetivos como con las sensaciones que provoca. Su extensión de 536 páginas (en la edición que atesoro) se hace liviana, grata, y se disfruta en dos o tres tardes, porque una vez cautivado por la historia, al lector le resulta difícil abandonar la lectura.
Salvador Allende, el Candidato, aparece en el libro
como ejemplo de integridad, entereza y fidelidad al pueblo
Debo resaltar algo que me resultó significativo. A medida que el libro avanza, la magia desaparece. Del realismo mágico que impregna los primeros capítulos del libro, la narración se va haciendo más prosaica cada poco, para terminar en un relato realista, crudo, sórdido, del golpe militar, de la destitución de Allende, cercado en la Casa de la Moneda, rodeado de sus fieles (entre los que se encuentra Jaime), y la posterior represión de sus partidarios e implantación de un pensamiento único dictatorial.
La captura y despiadada ejecución de disidentes por parte de los militares, y la indignante detención y reclusión de Alba en una prisión política, donde es incomunicada, humillada, torturada y violada repetida y sistemáticamente, son acongojantes. Padece privación sensorial, anulación de la voluntad mediante interrogatorios continuados, se le hace pasar hambre y sed, se le niega asistencia médica... Resulta triste ver que ni toda la influencia política de Esteban Trueba le permiten salvar a su nieta, representando así a la burguesía conservadora burlada y traicionada por los militares, a quienes financiaron y apoyaron, tras lo cual fue desplazada del poder y ninguneada por éstos.
"Hundido en su poltrona, como un anciano acabado, lo vieron llorar desconsoladamente. No lloraba por la pérdida del poder. Estaba llorando por su patria".
Algunos quieren ver maniqueísmo y un sesgo ideológico claro de Isabel Allende contra el régimen de Pinochet, que tiene sus partidarios y que muchos consideran legítimo. Es evidente que la autora, emparentada con el presidente Allende, colabora con su obra a limpiar el nombre de éste, quien padeció una campaña de descrédito y un boicot manifiesto de la derecha, apoyado y financiado por la CIA (llamado "la desestabilización económica") que fracturó en dos a la sociedad chilena y provocó la pérdida de apoyo y popularidad del presidente electo. En cualquier caso, hay que carecer de entrañas para no escalofriarse con los padecimientos de Alba, y conmoverse con la fuerza de voluntad con la que ella y otras presas y presos afrontan su cautiverio, incluso cantando para mostrar a sus verdugos que no han conseguido doblegarlos.
La calidez del color ocre es una constante en muchas portadas
La narración pasa, pues, por diversas etapas, y va variando su tono con la incorporación y salida de personajes. En esta línea, la aparición de la pequeña Alba aporta los momentos más cómicos del libro, que como ya comenté es una tragicomedia, pues siempre hay sitio para la sonrisa entre el drama que es la tónica general, y las ocurrencias de Alba provoca la risa más de una vez.
"A Alba le habría gustado que su tío se casara con mamá, porque era más seguro tenerlo de padre que de tío, pero le explicaron que de esas uniones incestuosas nacen niños mongólicos. Se quedó con la idea de que los alumnos de los jueves en el taller de su madre eran hijos de sus tíos."
Tengo que concluir, porque esta obra es inabarcable en una reseña, y aún hay que hablar de sus adaptaciones... pero me guardo un par de detalles que me fascinaron:
- Que el Padre Restrepo, el cura que predica con fervor fanático al principio de la obra, sea gallego :)
"El mismo Satanás era descrito hasta en sus más íntimas anomalías con el acento de Galicia del sacerdote, cuya misión en este mundo era sacudir las conciencias de los indolentes criollos."- Que se cite la industria salitrera, orgullo de Chile arruinado por los abonos sintéticos, un mundo que descubrí gracias a Hernán Rivera Letelier y su "La reina Isabel cantaba rancheras".
"En las provincias del Norte la quiebra de las salitreras había dejado en la miseria a miles de trabajadores."- La hermosa descripción de la manera de ser, sencilla y noble, de los campesinos:
" Lo escuchaban sorprendidos y confusos. Su tiempo se medía por estaciones, sus pensamientos por generaciones, eran lentos y prudentes. Sólo los más jóvenes, los que tenían radio y oían las noticias, los que a veces iban al pueblo y conversaban con los sindicalistas, podían seguir el hilo de sus ideas. Los demás lo escuchaban porque el muchacho era el héroe perseguido por los patrones, pero en el fondo estaban convencidos de que hablaba tonterías.- El entierro de el Poeta, convertido por el pueblo llano en un homenaje y en un acto de libertad.
—Si el patrón descubre que vamos a votar por los socialistas, nos jodimos —dijeron."
- Y por supuesto toda la colección de hechos mágicos y fantásticos que no cabe aquí: la plaga de hormigas de "Las tres Marías", el perro Barrabás, el vuelo transandino de Marcos, las visiones premonitorias de Clara, las sesiones de espiritismo con las hermanas Sosa, la cabeza insepulta de la abuela Nívea, las dotes de faquir de Nicolás... y la propia casa de la esquina, la mansión familiar que da sentido al título del libro, y su arquitectura imposible, casi no-euclediana.
Más datos de interés: En 1993, el estadounidense Billy August presentó la adaptación cinematográfica, una coproducción USA- Portugal - Dinamarca - Alemania, en la que se encargó de la dirección y del guión. Contó con un reparto de lujo, con Jeremy Irons como Esteban Trueba, Anchoniou como Pedro Tercero García, Winona Ryder como Blanca, Glenn Close como Férula, Vanessa Redgrave como Nívea, Meryl Streep como Clara, María Conchita Alonso como Tránsito Soto y Vincent Gallo como Esteban García. [Ficha IMDB]
No es una mala película, pero no logra trasladar la magnitud de la novela, y el resultado no convenció con unanimidad ni a crítica ni a público, pese a la esforzada interpretación de todo su elenco. Aún con todo, fue un relativo éxito de taquilla. Se puede visionar completa en Youtube.
Por su parte, la dramaturga estadounidense Caridad Svich realizo una adaptación libre, que han representado diversas compañías, como la costarricense Espressivo Teatro [Sitio web oficial y blog], la mexicana Ink Teatro o la chilena Teatro Mori.
Aquí tenéis un programa radiofónico sobre la versión chilena, con la intervención de la actriz Ana María Palma y del chileno Christian Riquelme.
Puesta en escena de la compañía tica Espressivo Teatro
Y creo que es necesario dejarlo aquí, porque me puedo extender ad infinitum hablando de lo mucho que contiene y ofrece "La casa de los espíritus": setenta años de la historia de Chile, romance, pasiones, emoción, sentimientos desbordados, historias enternecedoras, la trayectoria vital de un personaje que encarna a una nación entera como es Esteban Trueba... solo puedo deciros que he subrayado docenas de párrafos y que me parece una de esas lecturas que cambian la vida. Lo mejor es que vosotros mismos la leáis, si no lo habéis hecho ya, y sigamos hablando en los comentarios, en los que espero vuestros aportes. Nos leemos!