Una de las centrales solares más innovadoras de estos últimos años ya esta cada vez más cerca de convertirse en realidad. Se trata del proyecto de SolarReserve LLC, el Crescent Dunes Solar Energy Plant en EE UU en el estado de Nevada.
Esta central termosolar tiene una capacidad de generación de 110 MW, pero lo interesante es que será la primera central de energía solar termoeléctrica de Estados Unidos en incorporar el almacenamiento de energía térmica. Es decir el calor generado en la torre receptora se almacena a través de sales fundidas, los que permite un mayor rendimiento y un mayor tiempo de generación durante las horas de baja radiación solar.
Este mayor tiempo de generación tiene como principal ventaja que soluciona el problema que actualmente tienen las centrales solares fotovoltaicas, y es que no son capaces de generar energía en los horarios en que no hay sol, por lo que deben ser complementadas con otras formas de generación de energía.
En cuanto al receptor de sales fundidas, este consiste en cientos de tubos que fluirán con sales fundidas para la absorción y almacenamiento de energía.
Las sales fundidas ya se han usado para el almacenamiento térmico en otras centrales de energía termosolar, pero en este caso también se usan las sales fundidas como un receptor, lo que es un diseño relativamente nuevo.
Se espera que este proyecto este terminado para fines de este año, y será capaz de almacenar 10 horas de plena producción de electricidad.
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